Reducir gastos frente a la incertidumbre de las próximas semanas, así como ser menos consumista y reorganizar los hábitos de compra son parte de las prioridades estos días para los españoles. Así lo asegura el 77% de la población, una cifra que ha aumentado cinco puntos en una semana, siendo las mujeres las que muestran una inclinación mayoritaria hacia este tipo de acciones, con más del 80% de las respuestas.
De este modo, en estos momentos, casi tres de cada cuatro personas, con una proporción superior entre las mujeres, consideran que no solo hay que prestarse más atención a uno mismo (73%), sino también a las relaciones personales (79%). Una tendencia más acusada en el caso de las mujeres cuyas respuestas alcanzan el 81% y el 86%, respectivamente, un ascenso de entre tres y 11 puntos respecto a la semana anterior.
Respecto al ejercicio profesional, casi la mitad de la población (46%) declara que aprovechará estos días para buscar mejoras en este terreno. A esta tarea planean abocarse las mujeres (49%) y el 60% de las personas en la franja de edad comprendida entre los 18 a 24 años.
¿Cómo será todo cuando esto haya acabado?
La sociedad parece estar plenamente concienciada de que sufriremos una importante crisis económica global tras la crisis. Además, una amplia mayoría cree que muchos autónomos y pequeños comercios no podrán seguir con su actividad.
Paradójicamente, a pesar de la crisis que todos ven acercarse, se detecta una importante polarización de las opiniones cuando se les pregunta sobre si la situación laboral individual se verá perjudicada. Los colectivos que muestran una mayor preocupación al respecto son los jóvenes entre 18 y 35 años (43%) y las mujeres (41%).
Los datos muestran que nueve de cada 10 personas piensan que estaremos sumidos en una crisis económica de alcance global, mientras que ocho de cada 10 creen que los autónomos y pequeños comerciantes tendrán que cerrar.
A nivel de toda la población, casi cuatro de cada 10 temen verse afectados por despidos o expedientes de regulación de empleo temporales (ERTEs). Del otro lado de la balanza, un número similar de entrevistados piensa que esta situación no tendrá consecuencias para ellos, aunque el porcentaje ha bajado tres puntos respecto a la semana anterior.
Respecto a cómo afectará al trabajo, un 76% considera que, tras la crisis, el teletrabajo será una realidad para muchas empresas, así lo creen las mujeres de forma destacada (78%) y los mayores de 55 años (87%), y valoraremos mucho más nuestro tiempo, según indica un 76% de los consultados.
Finalmente, más de un tercio de los entrevistados cree que la sociedad saldrá reforzada después de este período (38%) y que habrá menos crispación, aunque un 32% de personas están seguras de que pasará exactamente lo contrario.