Subida de costes
En su caso, como a la mayoría, el incremento más destacable ha sido el coste de la luz y el gasóleo. “Habría que sustituir el consumo de energía eléctrica por otras renovables, pero esa solución no parece factible a corto plazo”, explica Sandra Sitjar, responsable de Comunicación de la compañía, donde son conscientes de que siempre hay margen de mejora y han de ser más eficientes. Por el momento, intentan llevar un control más exhaustivo, optimizando las temperaturas de frío necesarias según producto.
Recientemente, han invertido en placas solares en sus naves de Mercabarna y, próximamente, lo harán en las de Mercamadrid. Además de la eficiencia de sus instalaciones, han desarrollado en los últimos años su venta a supermercados y, más concretamente, de producto envasado o en bandeja, enfocándose en el desarrollo de nuevos formatos más sostenibles.
Tendencias
A diferencia de Barcelona, desde Cultivar constatan que Madrid aún no ha alcanzado un nivel de demanda que justifique la puesta en marcha de un pabellón solo para bio. “Es un proyecto muy bonito y atractivo, pero nuestro mercado sigue sin madurar lo suficiente al respecto”, afirma.
Desarrollan la venta a supermercados de producto envasado o en bandejas más sostenibles
Unidad Alimentaria
La situación es compleja, marcada por la falta de renovación de concesiones: “Echamos de menos una mayor colaboración entre los empresarios y Mercamadrid”. Entienden que se necesitan mutuamente y deben trabajar de la mano para que ambos sigan creciendo y mejorando, pero continúan haciendo falta, igual que antes de la pandemia, unas instalaciones cómodas, limpias, ordenadas y con la última tecnología. “Eso sólo lo conseguiremos con el trabajo conjunto de todos”, concluye Sitjar.