En esta campaña pasada, Europa ha batido récords en superficie y producción. Los datos de Países Bajos (principal productor europeo), unidos a los de Alemania, Reino Unido, Francia e Italia, muestran como la producción europea de cebolla en este 2019 ha sido la mayor en toda la historia, alcanzando los 6,34 millones de toneladas, un 19% superior a la del año anterior. Esta situación ha provocado que la comercialización de la cebolla española, se haya visto sometida a unos precios muy bajos.
El fin de la campaña de comercialización de la cebolla 2019 española, se está caracterizando por un manejo muy complicado para los calibres grandes, que están encontrando numerosos obstáculos para su colocación en el mercado. La declaración de Estado de Alarma, el cierre del canal principal de comercialización de los calibres grandes como es el HORECA, y la situación europea, ha provocado que la demanda de este tipo de calibre se haya derrumbado. “A Estas alturas de la temporada, las cámaras frigoríficas deberían de estar casi agotadas, pero aún tienen un 60% del género, debido a que la comercialización de la cebolla gorda ha sido casi imposible”. Así lo ha manifestado Justo Gutiérrez, presidente de PROCECAM, la Asociación de Productores de Cebolla de Castilla-La Mancha en la pasada reunión de esta Asociación para analizar la situación del sector y las perspectivas de esta nueva campaña. “Esta cebolla que queda va a complicar mucho el inicio de campaña. Hay que tener en cuenta que los gastos de almacenamiento de esta cebolla provocan que sus costes totales se disparen, y no poder comercializarla está provocando un grave daño”.
La campaña 2020 de cebolla española se presenta por tanto complicada. A la situación de la cebolla de calibre grande en los almacenes, se une la nueva cosecha que ya se debía de estar realizando a comienzos de este mes de abril, pero que se ha visto afectada también por las importaciones de cebolla de calibre medio procedente del hemisferio sur. La cebolla importada, tiene una mayor capacidad de conservación que las variedades españolas nuevas, por lo que algunas cadenas de distribución están apostando por ella.
Pero este motivo no es sólo la causa de la grave situación de la nueva campaña de cebolla temprana. La falta de mano de obra disponible en la segunda región productora como es Andalucía también amenaza con no poder recolectar este cultivo. Aunque la cebolla es un cultivo cada vez más mecanizado, las variedades tempranas son más finas de piel y su recolección se tiene que realizar de manera manual, y la situación generada con es Estado de Alarma, está provocando una difícil gestión de mano de obra disponible.
Los datos que está arrojando actualmente Europa sobre la superficie preparada para la siembra de cebolla, muestran que no habrá la reducción esperada por el sector. El cultivo de la cebolla, que en países como Países Bajos, Francia o Alemania si reciben pagos directos de la Política Agraria Común, y los menores costes de producción debido a que no soportan los elevados costes energéticos derivados del riego de los cultivos que si se soportan en España, han provocado que esta campaña, aunque con precios muy bajos, si sea una campaña rentable para el sector productor europeo. Sin embargo, para el sector español, debido a su estructura y costes de producción, esta campaña pasada ha sido ruinosa.
PROCECAM, Asociación de Productores de Cebolla de Castilla-La Mancha, cuenta actualmente con 178 socios directos y más de 371 productores de cebolla con una superficie cultivada en 2019 que supera las 7.120 hectáreas, lo que convierte a PROCECAM en un referente tanto a nivel español como a nivel europeo.