Con ellas, se da por iniciada una campaña que será recordada por las condiciones del Estado de Alarma a causa de la emergencia sanitaria. A pesar de ello y de las inclemencias meteorológicas, llega con buenas expectativas de volumen y calidad.
El primer día de cosecha es muy esperado por agricultores y consumidores, aunque las dos primeras semanas, la cosecha transcurre lentamente con las variedades más tempranas. Éstas, se destinan al mercado nacional, y será dentro de unos diez-quince días, cuando los volúmenes sean suficientes para empezar a exportar, y llegar a todos los mercados nacionales y europeos que están esperando nuestras codiciadas cerezas.
Las cerezas son un fruto rojo muy nutritivo, con alto contenido en antioxidantes; contienen provitamina A y vitamina C.
Las cerezas del Jerte tienen además una calidad exclusiva, apreciada dentro y fuera de nuestras fronteras. Los socios de la Agrupación de Cooperativas Valle del Jerte las recolectan a mano, una a una, con mimo y con pasión, cada fruto lleva nuestro sello, nuestra marca de calidad “zalama” que nos asegura que son cultivadas de forma sostenible, y respetando el entorno, en pequeñas explotaciones familiares. Tierras y tradición, que han pasado de generación en generación, desde que los árabes trajeron este tipo de cultivo a las faldas de las sierras que forman nuestro valle. Ese carácter familiar de estas explotaciones, ha asegurado en parte, que la mano de obra para la recolección esté asegurada.
La campaña de la cereza es el momento de mayor actividad en el Valle del Jerte. Esta fruta es el motor económico de la comarca, y durante su recolecta se hace necesaria una gran cantidad de mano de obra, tanto en el campo, como en las instalaciones de la Agrupación de Cooperativas, que llega a emplear en el punto álgido de la campaña, en torno a unas 1.200 personas de forma directa.
Este año, a pesar del Estado de Alarma, nos mantenemos como actividad esencial, funcionando a pleno rendimiento, y conservando los puestos de empleo que se generan en cada campaña.
La meteorología tampoco ha acompañado, y tras un invierno bastante suave y una floración relativamente temprana, el último mes ha estado marcado por las bajas temperaturas y las lluvias. Sin embargo, las estimaciones no dejan de ser buenas, y se espera que se cosechen entre 17 y 18 millones de kilos de cerezas, un volumen similar al de otros años.
En Europa ya están esperando las Cerezas del Jerte, la marca Zalama, tan valorada y apreciada. Inglaterra y Alemania serán sus primeros países de destino, dos países que destacan entre los clientes europeos que más aprecian nuestra cereza. Sobre todo, esperan a las últimas, las que más tardarán en llegar, que son las variedades de la DOP, las auténticas Picotas del Jerte. Como cada año, ellas pondrán la guinda final a esta campaña, y se dará por concluida la recolecta a finales de julio o principios de agosto.