Un año más, la Unión de Campesinos (UCCL) ve cómo la superficie de patata en Castilla y León se ve reducida un 6,13% con respecto al año pasado, pero la campaña se sigue desarrollando peor que años anteriores. Esta es la conclusión a la que han llegado el grupo de patateros que se dieron cita en el día de ayer en Tordesillas.
La organización agraria durante la jornada ha tachado la situación del sector de la patata como difícil, y ve como hay quien sigue apretando y abusando de la posición de dominio, mientras que la distribución y los grandes envasadores siguen peleando por sus cuotas de mercado a base de apretar al eslabón más débil, el sector productor.
Según los últimos datos publicados por la Consejería de Agricultura y Ganadería de Castilla y León en la campaña 2020-2021 se han sembrado 17.246 hectáreas de patatas, un 6,13% menos que el año pasado, y se prevé que la producción sea también inferior. Previsiblemente y según esta organización agraria, el consumo está siendo mayor que el año pasado, por lo que, según los datos objetivos, con una menor producción y un mayor consumo, el precio que se pague al productor debería ser igual o superior al del año pasado y nunca inferior.
Finalmente, la Unión de Campesinos de Castilla y León ha aprovechado la asamblea para informar sobre la interprofesional de la patata de Castilla y León que ya está en funcionamiento y ahora se debe lograr que se convierta en una herramienta útil en donde beneficio del todo el sector, repercuta a todos los eslabones por igual, incluido el productor.
