La cooperativa onubense Bonafrú está inmersa en un ambicioso plan de expansión que le permitirá crecer un 60% tanto en superficie como en producción y facturación, según estimaciones de la firma a las que ha tenido acceso la Revista Mercados. Las ventas de fresas, frambuesas y arándanos alcanzarán los 43 millones de euros cuando en el plazo de tres años estén a pleno rendimiento las 220 nuevas hectáreas adquiridas en la misma provincia pero fuera de los límites del condado fresero por excelencia.
La cooperativa de la localidad de Bonares, con la totalidad de la producción dedicada a la exportación, aglutina a 85 agricultores que ahora extenderán sus cultivos a una nueva finca ubicada entre Lepe y Villablanca, también en la provincia de Huelva. La firma partía antes de la expansión de una superficie que supera las 300 hectáreas.
El mayor esfuerzo del plan inversor de 19 millones de euros lo realiza la propia cooperativa, que invertirá un total de 12 millones en los terrenos que irá alquilando a sus socios. Los agricultores, por su parte, completan la apuesta con otros siete millones destinados a poner en marcha los cultivos.
En esta última campaña ya se ha sembrado un 40% de la nueva superficie, con una inversión de más de 4 millones de euros y la compra de 750.000 plantas de fresa, además de frambuesa y arándano. La nueva finca, denominada El Canario, “se ha elegido por tener un microclima muy conveniente para estos cultivos y dotaciones de aguas suficientes, algo esencial en estos momentos”, señala el gerente de Bonafrú, Diego Barriga.
Reparto de la superficie
Bonafrú alcanzó los 6 millones y medio de plantas en la pasada campaña, con un aumento del volumen de fresa y frambuesa. Los arándanos se mantienen en el 25% de la superficie cultivada dada la fuerte competencia existente tanto en Huelva como en países terceros como Portugal y Marruecos. En cuanto a variedades, la fresa Rociera ha pasado de tener un 20% de superficie al 50% esta última campaña.