BASF regresa con fuerza al mercado de pimiento y lo hace con una variedad creada para ganar: Krakos F1. Con este California rojo de ciclo medio (trasplantes de la primera quincena de julio) y con resistencia a oídio, “aportamos una variedad con valor añadido y una serie de ventajas competitivas que ayudan al agricultor a conseguir una producción más sostenible y rentable”, explica David Murcia, Regional Crop Lead EMEA de BASF, quien apunta que son tres los pilares sobre los que se sustenta ese valor añadido.
En primer lugar, Krakos F1 cuenta con una planta de porte abierto que, por un lado, contribuye a optimizar los costes de recolección, ya que “el fruto es perfectamente visible por el recolector”; y por otro, le otorga una mayor sanidad. “La arquitectura de planta de Krakos F1 favorece una mejor ventilación, ayudando a minimizar la aparición de enfermedades fúngicas” y, con ello, la aplicación de tratamientos.
Krakos F1 tiene resistencia a oídio.
En segundo lugar, el nuevo California rojo de BASF destaca por su producción escalonada durante todo el ciclo, de modo que “el agricultor puede capturar unos precios medios competitivos durante toda la ventana comercial de Almería”, apunta Murcia. Además, ofrece frutos de calidad, muy atractivos tanto en verde como en rojo, y de calibre (G) homogéneos durante todo el ciclo.
Por último, Krakos F1 cuenta con una gran capacidad de rebrote, que “ofrece al agricultor una producción extra al final del ciclo”.
De este modo, BASF vuelve al mercado de pimiento con “una variedad muy competitiva”, comenta David Murcia, quien no lo duda: “Krakos F1 ha llegado para ganar”.
