La medida de prohibir temporalmente, hasta el 30 de abril de 2021, los cítricos originarios de Argentina llega tras contabilizarse un número récord de detecciones de plagas y enfermedades: un total de 117 interceptaciones en 2020 frente a los 21 que hubo en 2019. La mancha negra de los cítricos es la que acumula más casos, una plaga de cuarentena que, de entrar y propagarse en la citricultura europea, ocasionaría pérdidas millonarias a los agricultores.
AVA-ASAJA reclama a las administraciones autonómica, nacional y europea que tomen “medidas más allá de la estética” en materia de sanidad vegetal, tales como el establecimiento de inspecciones en origen tal como imponen otros países a los productos agrarios europeos; la obligatoriedad de mantener un tratamiento en frío durante el transporte para prevenir determinadas organismos nocivos como la falsa polilla en cítricos; y la unificación de criterios en los controles de los puertos de entrada de todos los cargamentos de cítricos foráneos a fin de lograr la máxima especialización en las inspecciones.