ASAJA considera positivo el balance del primer año de aplicación del Código de Buenas Prácticas Mercantiles que ya cuenta con 78 entidades adheridas y al que hace precisamente casi un año invitábamos a las empresas almerienses a participar en el mismo sin que hasta el momento se hayan obtenido resultados, por eso desde la Organización insistimos a las empresas de la provincia a que den este paso. Y es que para poner soluciones permanentes hace falta el compromiso de todos los eslabones para que las relaciones en la cadena alimentaria sean equilibradas y transparentes y el agricultor reciba un precio digno que nos permita seguir avanzando en la sostenibilidad social, medioambiental y también económica de la actividad agraria.
Estos son precisamente los objetivos de este Código, que se enmarca dentro de la Ley de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, y que se dirigen hacia un mayor equilibrio y transparencia en las relaciones comerciales y donde se incluyen principios como la justa reciprocidad entre las partes, libertad de pactos, buena fe, interés mutuo, equitativa distribución de riesgos y responsabilidades, cooperación y transparencia, el respeto a la libre competencia y sostenibilidad de la cadena alimentaria.
ASAJA aprovecha este primer aniversario para pedir a la ministra Isabel García Tejerina que siga trabajando para aportar más transparencia y equilibrio a las relaciones comerciales entre los distintos eslabones de la cadena y especialmente que se persigan y sancionen todas aquellas prácticas comerciales desleales con el fin de erradicarlas de la cadena agroalimentaria.
ASAJA, que desde el primer momento apostó y suscribió esta iniciativa, valora que empresas de primer orden y prestigio comercial como son Mercadona, Nestlé, Clesa, Cuétara, Calvo, Siro, Calidad Pascual o Covap hayan refrendado este código voluntario en defensa de un mayor equilibrio y transparencia en las relaciones comerciales y para regular mejor las prácticas comerciales entre los diferentes agentes de la cadena y confía en que aquellas empresas que aún no están se sumen lo antes posible.
Junto a este instrumento de autorregulación que es el Código, el Ministerio de Agricultura puso en marcha un mecanismo de control que es la Agencia de Información y Control Alimentarios –AICA que desde enero de 2014 ha llevado a cabo un intenso trabajo con inspecciones, aperturas de expedientes y propuestas de sanciones para todas aquellas empresas del sector de la agroalimentación que han sido señaladas por incurrir en prácticas desleales.
ASAJA considera esencial la labor de la AICA que, junto con la propia Ley de la Cadena, son instrumentos valiosos para erradicar las prácticas desleales que tanto daño hacen al buen funcionamiento de la cadena y al propio sector productor. Por ello, ASAJA pide a la ministra que se empleen todos los medios necesarios para perseguir prácticas tan perjudiciales como la venta a pérdidas, los productos reclamo y se incentive la claridad y concreción en los contratos, los contratos tipo homologados y el cumplimiento de los plazos de pago.
Fuente: www.asajaalmeria.org