En Campo de Lorca han bastado apenas 12 meses para ser conscientes de que el segmento ‘eco’ es un gran filón. El año pasado nos contaban cómo estaban dando sus primeros pasos con 15 hectáreas de cultivo, y al regresar al principio de esta campaña hemos podido ver cómo han redoblado sus esfuerzos hasta alcanzar las casi 60 con las que cuentan en la actualidad (y que incluyen también producción de coliflor orgánica). “Hemos tenido una buena acogida a corto plazo y al detectar la demanda creciente en el mercado europeo, y la de nuestros propios clientes, creemos que es necesario apostar por este segmento”, cuenta el gerente, Juan Marín.
En esta campaña la empresa espera comercializar un volumen total de brócoli cercano a las 50.000 toneladas (entre producción convencional y bio). Buena parte se destina a Europa, un mercado “maduro pero que aún sigue en crecimiento”, y el resto se canaliza a otros destinos más alejados como Canadá, donde están consiguiendo ganarle terreno a las producciones de California y México por su mayor calidad. “El producto que obtenemos gracias al clima y al manejo de los cultivos, nos abre puertas para comercializar en los meses de junio a septiembre, fuera de lo que viene siendo la campaña tradicional de exportación”.
Mercado incipiente
Además del producto en piezas para comercializar en fresco, la empresa cuenta con otros formatos como las fl oretas con bolsas de unos 350 gramos y autocierre para ‘lavar y listo’. “El consumidor percibe que está comprando un producto selecto y 100% natural, que no está tratado ni procesado, y además se facilita el cocinado”.
Próximamente la fi rma podría incluir en su gama otros productos: como las miniverduras, que ya tiene en estudio; el romanescu, complementario a la gama del brócoli y que, tras unos años “desaparecido”, parece que vuelve a cobrar importancia; y la alcachofa, para la que han abierto una línea de I+D+I orientada al desarrollo de IV Gama. “Desde hace unos ocho años su consumo en fresco ha caído un 25%, así que vamos a apostar por el transformado para impulsarla tanto a nivel nacional como fuera, donde no se ha sabido vender”.
Virginia Hernández
