La enseña perteneciente al Grupo Uvesco, BM Supermercados, cuenta actualmente con una red de 220 establecimientos distribuidos, principalmente, en el norte de España (País Vasco, Cantabria, Navarra, La Rioja), Madrid y Ávila. Además, dispone de cuatro plataformas logísticas desde donde realizan la gestión del producto fresco. “Es nuestro valor principal, donde queremos diferenciarnos, y que supone el 40% de nuestras ventas”, afirma Mª José Aduriz, directora de Producto Fresco de Grupo Uvesco. Las frutas y verduras representan, en concreto, un tercio de esta sección.
Para lograr esa diferenciación, apuestan por un surtido de calidad, de proveedores nacionales y, siempre que sea posible, de productores locales. “Ofrecer a nuestros clientes productos de nuestro entorno más próximo no es una moda, forma parte de nuestro ADN”, insiste Aduriz, quien detalla que, de hecho, “el 90% de nuestras tiendas están abastecidas por un agricultor cercano, de la comarca, que suministra su producto directamente de la huerta”. Tanto es así que BM Supermercados tiene acuerdos con más de 400 agricultores y ganaderos locales, con muchos de ellos desde hace décadas como es el caso de los caseríos Longane, de Bermeo, y Goine, de Asteasu, Antton Olaizola, de Argoña, Mikel Alfonso Esquiroz, de Caparroso, o Iban Bustinza, de Lezama, entre otros. Estos alimentos están claramente diferenciados en su lineal por la marca propia Betako/Deaquí, con la que promocionan sus productos frescos locales, cuyas ventas crecen a un ritmo del 10% anual.
La marca Selecta es, por su parte, el distintivo que utilizan para referencias como las naranjas, kiwis o tomates, que no se cultivan en su ámbito de actuación, pero que también ponen a la venta tras pasar “estrictos controles de calidad con los que garantizamos su consumo en el momento más óptimo”. En la mayoría de los casos, se trata de productos de temporada.
Logística
BM Supermercados quiere seguir creciendo manteniendo este modelo de cercanía en el que ha confiado desde sus inicios y que le ha permitido cumplir un doble objetivo: “Garantizar la calidad de los productos frescos que ofrecemos en nuestros supermercados y comprometernos con la economía del entorno en el que estamos presentes”.
En esta línea, la enseña ha realizado un importante esfuerzo recientemente para la construcción y ampliación de sus plantas logísticas en Irún (Guipúzcoa) y Sámano (Cantabria), dos proyectos orientados al producto fresco y con los que continúa el proceso de centralización para mejorar la gestión con sus proveedores y los propios supermercados.
“Nuestro modelo responde perfectamente a las necesidades de un consumidor cada vez más exigente con su alimentación y que se preocupa por encontrar productos de calidad y beneficiosos para su salud”, concluye Aduriz.