Durante el recorrido que iniciamos para hacer este Especial de Melón y Sandía, hemos podido constatar una realidad que se viene palpando desde hace un par de campañas, la sandía se ha convertido en la protagonista de las frutas de verano, y lo que más llama la atención es que no solo lo ha hecho en las zonas donde el cultivo es más fuerte como Almería (con 8.200 Has y 2.860 hectáreas en melón), sino que ha llegado a ganarle terreno al melón en su ‘casa’, Castilla-La Mancha (8.000 Has de melón y 4.100 de sandía), y en Murcia (). Los motivos son varios: por un lado está el temor de los productores de melón al Nueva Delhi, para el que faltan variedades con resistencia y fitosanitarios autorizados. Otro de los motivos es el aumento de la demanda de sandía y su mejor evolución en precios, y es aquí donde merece la pena hacer más hincapié, ya que gran parte de este éxito se debe a la mejora varietal para poner en el mercado materiales que respondan a lo que realmente buscan la distribución y el consumidor final: sabor. Esta palabra se repite continuamente en el sector hortofrutícola, pero en sandía es realmente un elemento clave, y resulta paradójico al comparar su situación con el melón, una fruta donde justamente la falta de sabor ha sido su talón de Aquiles, debido a la apuesta por variedades más productivas que han dejado en segundo plano la calidad interna. Si hiciéramos un mapa con las variedades más cultivadas en esta campaña, podríamos ver que sobresalen aquellas que priman las cualidades gustativas: Bengala F1 de Nunhems (con un crecimiento importante en Almería, según los semilleros de la provincia), Fenway de Seminis, la nueva Red Jasper de Syngenta también está funcionando bastante bien, y en La Mancha Style F1 y Boston F1 de Nunhems. En melón, el Piel de Sapo sigue representando el mayor volumen, con Cordial y Gran Riado de Sakata y Velasco y Mendoza de Semillas Fitó como opciones más elegidas en Castilla-La Mancha, mientras que en Almería una de las variedades que más ha crecido es el amarillo Malerva de Fitó, y en Murcia Galia Magiar F1 y Cantaloup Magritte F1 de Nunhems. Como vemos, la sandía tiene por delante un gran futuro. Queda por ver si el sector del melón puede dar un paso al frente y apostar por la calidad que una vez le fue inherente.
Virginia Hernández
