Las previsiones apuntan a un crecimiento de la superficie de brócoli cercano a las 1.000 hectáreas este año. En el caso de Kettle Produce España, ¿con qué estimaciones cuentan?
Kettle Produce España continúa con su plan de expansión y crecimiento anual, en función de las demandas de nuestros clientes y plan de desarrollo. Este año, estaremos en torno a las 1.400 hectáreas. Producimos un amplio abanico de brásicas, tanto en convencional como en ecológico, y siempre estamos desarrollando nuevos proyectos para incrementar nuestro portfolio de productos, de manera que seamos capaces de dar servicio a las demandas de nuestros clientes. Actualmente, contamos con varias referencias dentro de las brásicas, como brócoli, coliflor, romanesco, kolh rabi, distintos tipos de coles, etc…
Las lluvias del final de la campaña pasada provocaron una gran humedad que repercutió, a su vez, en las siembras de primavera. Este año, además, ha vuelto a hacer calor hasta bien entrado octubre. ¿Cómo puede afectar esto al desarrollo del ejercicio?
Obviamente, los cambios climáticos afectan al producto, ya que rompen los ciclos de producción y, por tanto, los planes y programas establecidos. La localización de los cultivos hace que se vean afectados, en mayor o menor medida, por estos condicionantes, puesto que hay zonas más propensas que otras a enfermedades o plagas, así como el acceso a recursos hídricos. Sin duda, la sequía es uno de los retos más importantes a los que tendrá que hacer frente el sector en los próximos meses y parece que, lamentablemente, en los próximos años.
“Estamos desarrollando nuevos proyectos para incrementar nuestro portfolio de productos”
Condiciones climatológicas aparte, el sector sigue trabajando en la mejora de la calidad de sus productos. ¿Las variedades comerciales actuales satisfacen por completo sus demandas?
Es cierto que, actualmente, en el mercado hay una serie de variedades que son las más utilizadas pero, desafortunadamente, no contamos con una gama muy amplia que nos permita jugar con los ciclos, zonas de plantación etc. Es necesaria una mayor investigación que nos permita no depender casi en exclusiva de unas pocas variedades. El principal reto es lograr materiales que se comporten bien en función de la época del año, zona de plantación, respetando los ciclos de producción, con buena calidad y unos rendimientos aceptables. Por otro lado, también hay zonas donde la Botrytis es una enfermedad endémica y las restricciones de materias activas hacen más difícil su control; por eso, debemos buscar nuevas zonas de producción con una mayor ventilación que permita, dentro de lo posible, evitar o disminuir su impacto en el cultivo.
Por último, ¿cómo está afectando el Brexit a las exportaciones de brócoli?
El Reino Unido seguirá consumiendo brócoli como lo ha venido haciendo en los últimos años y el Brexit no debe afectar al consumo. Es cierto que el principal impacto ha venido, de momento, para el productor, con el tipo de cambio de moneda, que debe acabar, de una u otra manera, siendo repercutido en los precios de venta final, pues es prácticamente imposible ajustar más los costes de producción. De hecho, ya estamos viendo un considerable incremento de estos que el Brexit no puede, ni debe, trasladar a la producción.