Innovaciones CITROSOL para reducir las pérdidas postcosecha en fruta de hueso
A pesar de los importantes avances tecnológicos en la conservación de frutas y hortalizas, se siguen produciendo grandes pérdidas en estos productos a lo largo de la cadena de suministro.
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La FAO estima que un 14% del total de las frutas y hortalizas producidas a nivel mundial se pierden entre la cosecha y la venta al consumidor final. En productos hortofrutícolas frescos, una gran parte de esas pérdidas son causadas por enfermedades postcosecha. Y más aún, las pérdidas económicas causadas por dichas enfermedades suelen ser incluso mayores de lo que habitualmente se cuantifica, ya que el valor de estos productos se multiplica a medida que se avanza en la cadena de suministro.
En melocotones, ciruelas, cerezas y demás frutas de hueso, el género Monilinia (Figura 1a) agrupa a los principales hongos causantes de podredumbres postcosecha. Botrytis spp. y Penicillium spp. también pueden ser la causa de estos podridos, aunque con mucha menor incidencia. Además, en los últimos años ha crecido de forma significativa la incidencia de otros hongos como Geotrichcum. (Figura 1b) o Rhisopus. (Figura 1c). Estos géneros, que antes afectaban a la fruta de hueso de forma ocasional han pasado a ser una causa de importantes pérdidas en diferentes zonas productoras. El manejo de estas enfermedades postcosecha requiere de una estrategia integral, que tiene como punto de partida conocer la epidemiología y el ciclo de los diferentes patógenos para poder así controlarlos. Cabe recordar que un buen manejo postcosecha debe comenzar en el campo con buenas prácticas de recolección y transporte, y que el manejo adecuado de la temperatura a lo largo de todo el proceso postcosecha es una herramienta básica para mantener la calidad de la fruta una vez recolectada.
El Sistema Citrocide® ONLINE y Sistema Citrocide® permiten reducir los niveles de podrido sin importar el patógeno causante y sin dejar ningún tipo de residuo
Estrategia integral
Los fungicidas postcosecha son también una importante herramienta para reducir las pérdidas por podrido en fruta fresca. En este sentido, el fungicida CitroPyr® de CITROSOL puede emplearse en España para el tratamiento postcosecha de melocotones, nectarinas e híbridos. CitroPyr® está formulado a base de pirimetanil y se aplica para combatir las principales enfermedades fúngicas que afectan a la fruta de hueso después de la recolección. Pero, como se mencionó anteriormente, la estrategia no puede basarse solo en el uso de fungicidas. Asimismo, suelen existir patógenos que se escapan a la acción fungicida, como en este caso Geotrichum spp., o puede que existan restricciones de mercado que limiten o no permitan el uso de fungicidas de síntesis. Por este motivo, esa estrategia integral debe incluir soluciones que controlen o eviten el desarrollo de podridos y que garanticen una correcta higiene del proceso postcosecha. El Sistema Citrocide® ONLINE y Sistema Citrocide® completan las herramientas necesarias para esa estrategia integral de control del podrido postcosecha en fruta de hueso. Estos Sistemas aplican de forma segura y precisa los formulados peroxiacéticos Citrocide® PC o Citrocide® PLUS, ambos certificados como insumos para la agricultura ecológica. Estas soluciones permiten reducir los niveles de podrido en fruta de hueso (Figura 2) sin importar el patógeno causante y sin dejar ningún tipo de residuo en la fruta.