La actividad es frenética en las instalaciones de Frutas Los Cursos, ¡cualquiera diría que estamos a finales de agosto! Cuando muchas empresas de la zona apenas están comenzando la campaña, en esta entidad de la costa granadina se trabaja casi con la misma intensidad que en los meses de otoño e invierno. Antonio Rodríguez no se relaja, es consciente de la importancia de hacer un buen trabajo desde el primer momento, y así se lo transmite a sus trabajadores. Recorremos con él sus instalaciones, entramos en sus cámaras de maduración donde nos muestra el aguacate de importación que esta entidad comercializa y que ya está listo para su expedición: fruta seleccionada una a una, con una presentación muy cuidada. «Tras recibir el producto, lo volvemos a calibrar y desechamos aquellos que no cumplen con los estándares de calidad que nosotros mismos nos fijamos.
Y siempre comercializado con un etiquetado correcto, marcando su origen”, nos dice Antonio, convencido de que este trabajo ayuda a incrementar la demanda de tropicales. “Son muchos los compradores internacionales que tras ver la presentación de mi producto, fidelizan sus compras, por eso considero que ese es el reto del sector, trabajar por una mayor profesionalización, más aún con las previsiones de volumen que esperamos sobre todo en la campaña nacional”, explica Rodríguez.
Y es que la buena climatología de este invierno y primavera en España hacen prever una campaña con unos volúmenes muy elevados, de ahí que el sector necesite optimizar todas las herramientas de que dispone para defender mejor su posición en los mercados. Además, el veto ruso a las frutas y hortalizas europeas viene a agravar la situación. “Porque no nos engañemos”, afirma Rodríguez, “nos afecta y mucho. Quizás no exportábamos directamente a aquel país, pero sí de forma indirecta, a través de importadores europeos, por lo que los pedidos de esos clientes se van a reducir”.
Mejoras continuas
Estas contrariedades de los mercados, a las que Frutas Los Cursos estamos seguros que se podría hacer frente, no han sido motivo para frenar las mejoras en sus instalaciones. La entidad ha ampliado las cámaras de maduración e instalado nuevas maquinarias para calibrar la chirimoya, fuertes inversiones que se suman a las realizadas para la compra de cajas de campo y que Frutas Los Cursos pone al servicio de sus agricultores.