El sector actuará contra la ampliación del contingente chino

O

tros países productores de ajo han determinado un valor mínimo a partir del cual se debe comercializar el producto, para poder ser rentables. Una medida que en España, a causa de la falta de unión del sector, no se lleva a cabo. Así, la sucesión de campañas con bajos precios está poniendo en la cuerda floja a un cultivo que representa una importante actividad económica y de empleo en nuestro país.

Entre los principales desencadenantes de esta situación se encuentra la competencia china que, como primer productor mundial, hunde el mercado europeo y lo hace con cada vez peores medidas arancelarias. Esto es, recientemente la UE ha ampliado el contingente de importación permitido de ajo procedente de China a 12.375 Tn más debido a la entrada a la UE de Bulgaria y Rumanía. Esta cifra representa un 36% más de volumen del contingente asignado a China, mientras estos dos países que han entrado sólo representan el 6% de la población europea. “Esta operación agrava aún más nuestra posición en el mercado”, declara al respecto el presidente de la Mesa Nacional del Ajo y de Coopaman, Julio Bacete, quien sostiene que continuarán solicitando, no sólo una “mayor vigilancia para el respeto de los cupos de importación, sino también otro tipo de medidas que defiendan de verdad al sector, y por supuesto una mayor unión”. Para afrontar toda esta situación, se intentará ir de forma conjunta con el ANPCA para establecer las acciones que se puedan acometer en defensa del sector.

A pesar de esta competencia, el sector lucha por alcanzar y mantener la rentabilidad, perjudicada también por la presión de los operadores. En este sentido, añade: “La distribución está haciendo su trabajo y nosotros no”.

Coopaman

Un ejemplo de esta unión que busca el sector, está representada por la cooperativa de segundo grado Coopaman, formada por 6 entidades, que aúnan sus fuerzas para demostrar el potencial que se puede alcanzar trabajando juntos. Constituyen la principal entidad productora de ajos en España y por tanto de Europa con un volumen de 17 mil Tn anuales y una facturación de 21 millones de euros. Su esfuerzo conjunto le permite realizar apuestas en I+D en la búsqueda de semillas más resistentes y de innovaciones que aporten un valor añadido al producto diversificando con proyectos como el ajo sin olor, extractos de ajo, etc.

En esta línea, se ha de destacar que nuestro país es puntero en investigación a nivel mundial en lo que a variedades, maquinaria y técnicas de cultivo, multiplicación y almacenamiento se refiere. Pese a ello, el ajo español no logra una buena cotización en el mercado y necesita de una mayor promoción para fomentar su consumo nacional y europeo.w