Tras más de dos años de pandemia, casi se puede dar por concluido un periodo de mucha incertidumbre, donde la unidad alimentaria de Madrid supo tener la flexibilidad necesaria para abastecer a la población sin apenas roturas de stock. Sin embargo, cuando parecía que llegaba un período de recuperación económica, con una leve inflación, el conflicto en Ucrania ha agravado una crisis de costes que se está traduciendo en subidas del 35% para las empresas de Mercamadrid. Así lo apuntan desde Grupo Guerrero o Frutas Candil, “estamos viviendo una etapa difícil y compleja”, a la que no terminan de ver una mejora a corto plazo y con el temor de que los costes no vuelvan a valores normales.
Desde la Dirección del merca señalan el importante esfuerzo inversor que están haciendo, casi 4 millones de euros, en seguir ampliando servicios y mejorando las infraestructuras abordando, entre otros, proyectos que les permitan ser más eficientes en el contexto actual, como la sustitución de luminarias del recinto por equipos LED, que doblan la capacidad lumínica y reducen a la mitad el consumo eléctrico.
Ante ese escenario, una de las principales fortalezas del sector ha sido su capacidad de adaptación. “Somos un sector que siempre nos hemos tenido que reinventar ante las adversidades”, explican desde Lorenzo Carrasco.
Una de las demandas que realizan desde Asomafrut es una reducción de la subida de los alquileres, que cifran cercana al 5,55% y que consideran excesiva comparada con el 2,8% que subió Mercabarna. “Todo va sumando y se reducen cada vez más los márgenes, no hay ya espacio para repercutir los costes”, explican desde la asociación de mayoristas.
Muchas empresas apuntan a la eficiencia de los procesos para soportar estos incrementos. En Mercamadrid son conscientes de ello y hace años que llevan invirtiendo y ejecutando ese cambio a un modelo más eficiente y sostenible, “las empresas acumulan años de mejora de su competitividad y un compromiso inequívoco con una mayor eficiencia; formamos parte de un sector que ha demostrado una enorme capacidad de adaptación”.
En relación a ello, y tras haber hablado con varias empresas de la unidad alimentaria, uno de los temas que preocupan en cuanto al futuro es la renovación de las concesiones. Reclaman mayor interés del Ayuntamiento, porque paralizan las inversiones como demandan desde Hermanos Montes. La cercanía a la fecha de finalización bloquea las apuestas de las empresas por un futuro más estable y seguro. Desde la Dirección del merca señalan que existe un consenso y acuerdo político sin precedentes en torno a esta cuestión. Y citan que el pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó los Acuerdos de la Villa para la reactivación de la ciudad, que incluyen el compromiso de realizar todas las acciones necesarias para asegurar la continuidad de Mercamadrid más allá de 2032. Y, aunque aún no se tienen fechas de ampliación, ya se han iniciado las sesiones de la “Mesa de Trabajo Mercamadrid 2032”, con Mercamadrid, asociaciones de las empresas de la unidad alimentaria y representantes de los grupos municipales.
Otra de las demandas históricas que las empresas nos transmitieron es el cambio de horario. Si bien hace unos años se intentó la modificación con resultado negativo, no es un tema olvidado. Y sobre todo viendo los buenos resultados que ha traído a Mercabarna; con una mayor conciliación familiar, no se produjo el descenso de la productividad, impulsó la internacionalización y permitió la mayor incorporación de la mujer. Como comentan desde CMR Infinita, “el horario está anticuado, antes había otras necesidades, pero ahora se queda el merca vacío a partir de mediodía”.
Proyectos
Mercamadrid se fija proyectos que les permitan avanzar en la modernización y mejora de la competitividad, en el marco de un sector dinámico y muy exigente, que apuesta por hacer de la unidad alimentaria un referente para la exportación. Para ello, se ha puesto en marcha la Oficina de Acción Exterior, un nuevo servicio que aporta valor a los clientes y busca colaborar con las empresas para incrementar su actividad exportadora, porque cada día son más los profesionales y empresas internacionales que visitan la unidad alimentaria para conocer su oferta y servicios.
En esa línea, abogan por el avance en la circularidad, la apuesta por una movilidad sostenible, avanzando en la sostenibilidad, con la separación y valorización de residuos, que ha alcanzado cuotas superiores al 70% en los últimos meses. Así, las empresas solicitan la creación de una nave de envases vacíos y un proyecto de mayor eficiencia energética para aprovechar todas las superficies de paneles solares que soporten todas las cámaras y el gasto que suponen.
Mercamadrid también se marca el objetivo de seguir trabajando en la transformación digital, incorporando cada vez más servicios digitalizados. Este último punto también impulsado por Asomafrut para que las empresas puedan aprovechar los Fondos Next Generation y éstos supongan mejoras cualitativas.
Recientemente, se han conseguido nuevas alianzas como la llegada del Centro Nacional de Tecnología Alimentaria a la unidad alimentaria, y se han abordado proyectos que muestran el compromiso de Mercamadrid con la sociedad, como su apuesta por la formación en el sector.
A pesar de que Asomafrut valora positivamente todo el trabajo de la Dirección, piden que “sean más efectivos en temas como el de las concesiones, es fundamental y urgente”.