Buena muestra de ello fue el retraso de un mes que se tuvo en la siembra la pasada campaña, que no permitió a la planta madurar adecuadamente y provocó un alto porcentaje de mortandad en Huelva en las variedades más delicadas. Por todo ello es esencial el trabajo que se realiza en el vivero de altura. En Fresón de Palos son conscientes de su importancia y desde hace décadas cuentan con su propio vivero para poder controlar la calidad de su producción desde el inicio. Su director técnico, Alfredo Arcos, nos comenta que el desarrollo de la planta está siendo el correcto en esta campaña: “La plantación se ha realizado en tiempo y forma y el clima ha acompañado sin adversidades importantes; ha sido una primavera poco lluviosa, un mes de mayo de mucho viento, pero la evolución de las plantaciones, a la fecha, está dentro de un orden”.
Su superficie varietal se mantiene estable esta campaña y la ocupan tres variedades principalmente, Fortuna, Rábida y Rociera, aunque se han incorporado algunas más de prueba “que tienen buenas perspectivas”. Se trata de una planificación diseñada por el Consejo Rector y la Dirección de la empresa y, por tanto, es decisión de todos los socios.
Como miembros de la asociación Freshuelva Viveristas, en Fresón de Palos ven con buenos ojos la recuperación de la actividad de la Asociación Española de Viveristas, con la que trabajan de la mano para afrontar las dificultades del sector, teniendo así un solo interlocutor con la Administración. Entre los retos que acometen, destaca el problema sanitario que existe por la falta de materias activas autorizadas en las desinfecciones de suelo: “Estos productos están regulados con un uso excepcional de 120 días, pero el registro definitivo no llega y la preocupación está en que se deniegue y nos veamos obligados a triplicar la contratación de superficie, entre otras medidas”, concluye el director técnico.
Fresón de Palos
• Superficie: 90 ha.
• 50% Fortuna.
• 30% Rábida.
• 20% Rociera.