El bastión bio, cada día más presente. UNEXPORT
El volumen de lechuga ecológica aumenta cada año en Unexport en respuesta al crecimiento de la demanda en los países del Norte y Centro de Europa.
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El crecimiento progresivo del consumo de productos ecológicos en Europa es indiscutible y ello se refleja en el aumento de la demanda en origen, como sucede en países productores como el nuestro. En este contexto, los cultivos de hoja están teniendo un fuerte protagonismo, como manifiestan desde la unión de cooperativas murcianas Unexport: “Hemos aumentado la producción de lechuga ecológica de iceberg, romana y cogollo y ya estamos planificándolo todo para seguir creciendo el próximo año porque hay países donde desciende el convencional y aumenta la línea bio”, comenta su director comercial, Thomas Anderson.
Escandinavia, Reino Unido y Suiza son sus principales mercados de destino y las expectativas de crecimiento son muy positivas. Hoy por hoy, el segmento ecológico representa un 20% del volumen de negocio de Unexport y todo apunta a que este porcentaje seguirá aumentando cada año.
La producción de lechuga total de la cooperativa alcanza los 8 millones de kgs, es decir, un 15% de su volumen global, convencional y ecológica. El tipo iceberg representa un 80% en estos cultivos de hoja, aunque está perdiendo peso, poco a poco, frente a la romana, que gana cada día más adeptos. Aún así, dado el volumen que manejan de iceberg, sigue siendo la líder en el mercado. “Nos la solicitan siempre en marca blanca y suelen demandarlo a granel”, especifica al respecto.
Desarrollo
de la campaña
La sobreproducción registrada en este ejercicio ha bajado la cotización del producto en el mercado a niveles irrisorios ofreciendo unos resultados muy negativos. Esto hace que el sector se plantee la necesidad de una correcta organización productiva. “La falta de regulación en la oferta es uno de los retos más importantes que debe afrontar para que no vuelva a repetirse esta situación”, sostiene Anderson.
Por otra parte, en el ámbito de variedades, los productores ven necesario materiales con mayor resistencia en los meses de invierno para adaptarse mejor a las variaciones de temperatura, dado el desarrollo climático de los dos últimos años.
ALICIA LOZANO