Son los defensores colocados en la primera línea de la batalla frente al Covid-19 y no siempre obtienen ese reconocimiento público a su labor, que no buscan, pero que sin duda es de ayuda. Los profesionales sanitarios se enfrentan en estos días a la tercera ola del Covid-19 y lo hacen, como en las dos anteriores, con mucha más presión de la idónea para soportar largas jornadas de trabajo y durísimas escenas de su profesión.
Por eso, Grupo Agroponiente ha querido volver a acordarse de ellos, como en la primera ola, y realizar la entrega de una remesa de producto fresco (tomate en este caso) para repartir entre los profesionales del Hospital del Poniente, que fue llevada a cabo el pasado viernes en las instalaciones de la propia infraestructura sanitaria ubicada en El Ejido.
Obviamente, la acción es mucho más simbólica que efectiva, puesto que con estos tomates del campo almeriense se pretende, únicamente, recordar a todo el colectivo sanitario, no sólo del Hospital del Poniente sino de toda la provincia, que desde el tejido productivo agrícola de la provincia se los sigue tenido muy presentes en todo momento y se reconoce su extraordinaria labor y su sacrificio en beneficio de toda la sociedad.
Desde los responsables del Hospital que recibieron el pedido se constató el estado de tensión personal que viven los profesionales sanitarios desde hace meses, tanto por la multiplicación del volumen de trabajo como por la gravedad de la situación, que ha vivido varios picos desde el pasado mes de marzo y que ahora alcanza uno de los más importantes.
El CEO de Grupo Agroponiente, Jorge Reig, ha querido resaltar “nuestro compromiso total con la comunidad sanitaria. En esto, creo que puedo hablar en nombre de toda la familia de la agricultura: los agricultores, los trabajadores de almacenes y de empresas hortofrutícolas, los empresarios del sector, estoy convencido que todos estamos al lado de nuestros profesionales sanitarios y, aunque esta donación de producto sea sin duda alguna un hecho simbólico, con él hemos querido trasladarle nuestro ánimo y, sobre todo, nuestro cariño. Sabemos que les debemos muchas y, al menos, queremos que tengan muy clara la admiración que tenemos por ellos”.