Pink Lady incrementa sus ventas un 4% en España
Las manzanas Pink Lady han cerrado la campaña con un incremento de sus ventas en un 4% en España en 2016 y un 118% en los últimos cuatro años.
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En concreto, las ventas han sido ligeramente superiores a las del resto de manzanas desde los últimos dos años como consecuencia del declive que están sufriendo las variedades de Golden y Royal Gala. Así, Pink Lady representa aproximadamente el 2% del mercado de la manzana en España y produce dos tercios de las ventas entre marcas de esta fruta.
Respecto a la producción, en la última campaña se han producido en España 7.130 toneladas (4.052 en Girona y 3.078 en Lleida), lo que ha supuesto un incremento del 1,5% por encima del mercado de manzanas que cayó un 5%. «Por eso, podemos decir que Pink Lady ha experimentado un crecimiento del 118% en los últimos cuatro años», han señalado los productores españoles.
Los productores españoles Alex Creixell y Joan Serentil se han congratulado del buen recibimiento que tienen sus manzanas entre la distribución española, y reconocen que les ha «sorprendido» su presencia en Lidl. «Se ha convertido en la cadena de distribución que más vende Pink Lady y es algo sorprendente», ha asegurado Creixell.
Por su parte, Serentil ha asegurado que no descartan poder entrar en Mercadona, ya que es la única cadena de la distribución nacional en la que no está presente, mientras que espera ampliar su presencia en DIA, donde reconoce que les está costando entrar, a pesar de que sus manzanas están en los lineales de El Árbol.
APUESTA POR LLEVAR SUS MANZANAS A CANADÁ
Las manzanas Pink Lady españolas apuestan por la exportación para crecer, ya que menos de la mitad de su producción se dedica al exterior, aunque están presentes en Irlanda, Portugal, Reino Unido y Alemania, además de llevarlas al Golfo Pérsico e Israel.
Serentil ha reconocido que se han marcado como objetivo que un 6% de la producción vaya a países fuera de la UE para «salir de la zona de confort». Así ha asegurado que le gustaría entrar en Canadá, que es «un mercado de futuro» y tratar de quitar «cuota de mercado a los americanos porque vender en Estados Unidos es una utopía».
De cara al futuro, los productores españoles son optimistas y estiman producir 275.000 toneladas entre España, Italia y Francia, manteniendo la «producción sostenible, el equilibrio entre las distintas áreas (plantación y ventas), el dinamismo social y el impulso económico a nivel local que supone su producción en Lleida y Girona».
