Soluciones a los principales desafíos para obtener cosechas excelentes en cítricos

Durante su presentación, Puchol ha explicado que la citricultura española tiene que garantizar su excelencia y gran calidad para competir en mercados tan exigentes como los de los países del centro y norte de Europa. “Son consumidores que reclaman cítricos de gran sabor y calidad producidos de forma sostenible. En España podemos ofrecer estos productos, pero necesitamos producir más cosechas con estas características para obtener precios competitivos”, ha señalado.

En este sentido, trabajar con la biotecnología para lograr la excelencia en las cosechas es una herramienta fundamental para alcanzar estos objetivos “y esto se consigue analizando qué problemas tenemos y aportando soluciones”. Puchol ha identificado la fecundación y “amarre” de los frutos en las variedades complejas y poco productivas, así como el engorde en variedades muy productivas, como uno de los retos más destacados a los que se enfrenta la citricultura.

Vicente Puchol ha explicado los elementos de la flor que condicionan el éxito del cuajado: buenos niveles de polen fértil, la óptima configuración morfológica del ovario, el grosor del pedúnculo y el disco, la actividad de este último y el efecto sumidero. El objetivo para alcanzar una buena cosecha es garantizar estas características.

En variedades poco productivas como Orri, Oronul o Navel Powel, la aplicación de soluciones biotecnológicas, como FECUNDATOR, influye de modo directo en la óptima formación morfológica de las flores, es un precursor de la diferenciación de los frutos post-fecundación. Este efecto permite poder trabajar con las primeras flores, siendo selectivo y discriminando segundas y terceras floraciones cuando son innecesarias.

Además, un estudio realizado por EDYPRO, junto a la Universidad de las Islas Baleares, sobre transferencia de Gases y Captación de CO2 en la variedad Orri, concluye que a mayor traspiración el árbol consume más cantidad de hidratos de carbono para reequilibrarse a diario y poder recomponer su estabilidad fisiológica. Este consumo excesivo de hidratos de carbono desabastece el suministro a los frutos en el “efecto sumidero” y supone la deshidratación de muchos de ellos. Aparece, en primer lugar, la muerte de las células del disco que forman la unión del cáliz con el fruto y el este se desprende, quedando el cáliz pegado al árbol. Por lo que es importante corregir los desequilibrios de la apertura estomática que influyen en la captación de CO2 para mantener la capacidad fotosintética del árbol.

En cuanto al engorde, el CEO y director técnico de EDYPRO, ha mostrado cómo la aplicación de biotecnología con MAX QUALITY influye positivamente en variedades como Tango, Sanguinelli, Orri y Oro Nules. Vicente Puchol ha mostrado los resultados del manejo con MAX QUALITY para potenciar el engorde. Este producto, aplicado en la primera fase del engorde (desde la fecundación hasta la caída fisiológica del fruto), aumenta el suministro y la acumulación de metabolitos y carbohidratos en el fruto por parte del árbol a través de la fotosíntesis. Incide en la configuración exterior morfológica del fruto, con el incremento y la estandarización del tamaño y lleva el fruto a las características morfológicas óptimas de la variedad, dándole la forma genéticamente predeterminada. Además, activa la división celular en la corteza, por lo que se garantiza la calidad en las fases siguientes.

El uso de la biotecnología en la segunda fase de engorde promueve de modo directo la activación de los genes responsables de aumento de los segmentos de la pulpa, el grosor del eje central. También potencia el desarrollo de los lóculos, en cuyo interior están las vesículas de zumo e incrementa el tamaño del pedúnculo vesicular que determinará la densidad y el peso específico. En el interior del fruto, remarca las características organolépticas de la variedad: aumentando el tamaño de las vesículas oleíferas y acentuando el contraste de azúcares y acidez.