Un control absoluto de la trazabilidad. El Dulze
Hace un año que El Dulze implantó el sistema de trazabilidad de última generación Bleecker, con el que ha logrado casi un 100% de fiabilidad. Ahora prevé aplicar esta tecnología a áreas como Producción.
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El control absoluto de la trazabilidad en todos sus procesos y la consiguiente reducción de sus costes de producción. Estos fueron los objetivos que se marcaron hace un año en El Dulze Growers, cuando decidieron sustituir la tecnología RFID implantada para controlar la trazabilidad de sus productos por un sistema de última generación: Bleecker. Y los resultados no han podido ser más satisfactorios: “Hemos conseguido un 99,9% de fiabilidad y lecturas”, afirma José Ramón Sánchez, CBDO en El Dulze Growers.
Bleecker es un sistema de trazabilidad en tiempo real basado en visión artificial, que permite identificar mediante marcadores toda la mercancía que entra y sale de las instalaciones. Estos marcadores tienen asociada toda la información sobre los productos, desde la variedad utilizada y los tratamientos aplicados durante el cultivo hasta qué personas han intervenido durante su manipulación en el almacén, cuándo se confeccionó o su destino final.
Para ello, todos los palets (tanto de materia prima como de producto terminado) llevan una etiqueta con un código Bleecker desde su salida del campo, y que es leída por las cámaras instaladas en las distintas zonas de las instalaciones de El Dulze sin necesidad de que el operario que los transporta tenga que detenerse.
“ El uso del sistema Bleecker ha permitido a El Dulze reducir un 30% los costes de personal en la entrada de producto»
Así, por ejemplo, en la zona de ‘Entrada de producto’, una vez se coloca el camión en el muelle, automáticamente, el sistema detecta qué camión es y qué transporta. Asimismo, y a medida que se inicia la descarga, se van identificando los palets, indicándole a los operarios a través de una app cuál es el destino de esa mercancía. Asimismo, en la zona de ‘Expediciones’, hay una tablet en cada uno de los muelles, de modo que cada camión pueda indicar los palets asignados que ha cargado y, en caso de error, se activa una alarma sonora y visual con el fin de impedir cargas erróneas.
Gracias a la implantación del sistema Bleecker, El Dulze ha logrado reducir en un 30% los costes de personal en la zona de ‘Entrada de producto’, así como los ‘tiempos muertos’; y todo ello sin contar la minimización de “los fallos humanos que existían en el proceso de identificación de mercancías e introducción de datos manualmente”, explica Sánchez.
Dados estos buenos resultados, El Dulze planifica ahora su implantación en áreas como Producción o las zonas de paso. Y es que, en plena pandemia, el sistema Bleecker les ha permitido, incluso, descongestionar puntos críticos como el área de descargas de producto del campo, “algo que hubiera sido casi imposible con el crecimiento que estamos teniendo, dificultando el cumplir con los horarios de expedición con nuestros clientes”.