Nuevas variedades para mejorar en calidad. EXPLUM
Estas son las claves de futuro de la fruta de hueso, según Explum, que exporta a ultramar más del 50% de su producción y que esta campaña espera poder enviar sus primeras ciruelas a China.
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Los productores extremeños de fruta de hueso miran hacia los mercados internacionales porque “ni España ni Europa son capaces de absorber toda la ciruela que produce la región”. Así al menos opina José Aurelio García, director gerente de Explum, una cooperativa que agrupa a 75 productores, la mayoría de la localidad de Valdecalzada (Badajoz) y que se ha especializado en largas distancias. Desde Canadá hasta Brasil, pasando por Colombia, Centroamérica, Egipto, Emiratos Árabes, Malasia o India. El año pasado se quedaron a las puertas de llevar por primera vez sus frutas a China y este año ya lo tienen todo listo para enviar sus primeros contenedores.
La experiencia de empresa en exportación le hace tener una perspectiva muy clara en torno a las necesidades y retos del sector, en lo relativo a la apertura y consolidación de mercados internacionales. El director gerente nos explica que “por una parte hay que desarrollar programas de mejora varietal; por otra, hay que invertir en packaging que contribuya a la postcosecha de la fruta y, por último, investigar en la eficiencia del tránsito”. Estos son los retos que tienen por delante este sector y esta cooperativa en concreto para mejorar las condiciones en destino.
Menos producción de ciruela
Explum prevé una mermas de un 30% en la producción de ciruela. Las lluvias de finales de marzo podrían haber afectado a la floración, por lo que se espera una menor cantidad que José Aurelio García confía que sea compensada con los precios de la fruta. Dada la importancia de este cultivo en la cooperativa- el 85% del total-, cualquier incidencia tiene claras repercusiones. En la última campaña, de las 11.000 toneladas que recogió la cooperativa, 10.000 fueron de ciruela y el resto de melocotón y nectarina.
Su marca, Explum, cuenta con el reconocimiento de los mercados, aunque según su gerente, lo más importante es la calidad de la fruta y la seriedad y profesionalidad que proyecta la empresa entre sus clientes. Por eso, más que invertir en marketing, ellos prefieren apostar por las mejores variedades y tener modernas instalaciones, más de 10.000 m2, capacidad de frío superior a 3.000 Tn y de procesado con 300 Tn diarias para atender a la demanda de sus clientes en cualquier momento de la campaña.
Beatriz Peña