La marca se alimenta cada día. PLÁTANO DE CANARIAS
Sergio Cáceres, gerente y director de Marketing y Comunicación de Plátano de Canarias.
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‘Y si tiene motitas, mejor que mejor’. Si recuerdan esta campaña de Plátano de Canarias de 2010, entonces esta Indicación Geográfica Protegida (IGP) ha logrado su objetivo: ser una marca reconocida por el consumidor. Y también entenderán por qué ha resultado elegido uno de los más influyentes en marketing del sector hortofrutícola.
Para Sergio Cáceres, su gerente y director de Marketing y Comunicación, supone una “verdadera alegría” por el reconocimiento del propio sector a una trayectoria de décadas por parte de los productores de plátano, profesionales comprometidos con la gestión de la marca a largo plazo y, sobre todo, conscientes de la importancia de la “inversión permanente, año tras año”. “Son ingredientes básicos, sin los que no podríamos haber avanzado”, insiste.
Cáceres considera el marketing una actividad “necesaria” para el sector de las frutas y hortalizas, y sus argumentos son más que sólidos: “La empresa sin diferenciación sólo puede vender a precio y no hay diferenciación posible sin marketing”, y por supuesto, sin una marca reconocida por el consumidor. “Seríamos un genérico y, por tanto, estaríamos imposibilitados para competir”, afirma.
«La empresa sin diferenciación sólo puede vender a precio y no hay diferenciación posible sin marketing»
Ahora bien, la marca no es algo estático, sino que “se alimenta cada día” y se actualiza. Plátano de Canarias lo hizo hace años, cuando comenzó a vincular su producto con la alimentación saludable y el deporte, y vimos como imagen de sus campañas de promoción a Mireia Belmonte o, más recientemente, a la Selección Española de Fútbol. Pero no solo eso.
Con la erupción hace ya un año del volcán Cumbre Vieja en La Palma, Plátano de Canarias volvió a ponerse del lado de sus productores y, en esta dramática ocasión, se convirtió en abanderado del “propósito de supervivencia de cientos de familias afectadas”.
Muchos pensarán que con sus actuales niveles de reconocimiento entre los consumidores y, sobre todo, fidelidad a la marca, en Plátano de Canarias tienen ya todo el trabajo hecho. Sin embargo, “si no hay constancia en el largo plazo, será imposible afrontar los nuevos retos permanentes”. Entre ellos, seguir dando a conocer el valor añadido de su producto entre una población cada vez más heterogénea con el objetivo de que también reconozca la marca. Además, conscientes del relevo generacional y de las nuevas formas y canales de comunicación, tienen claro que “aún nos queda mucho por hacer”. Y es que, como concluye Cáceres, “la marca no sólo hay que construirla, sino que debemos mantenerla”.
Los pilares de su éxito
1. Sinceridad en la comunicación de su producto.
2. Adaptación de sus mensajes a la demanda del consumidor.