El precio no ha mejorado pese al aumento de la demanda. BIOPROCAM
Entre los retos del sector ecológico está la planificación de la producción para evitar picos de sobreoferta y mantener una cotización diferenciada, como señalan desde Bioprocam.
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El ecológico ha sido una de las líneas que mayor crecimiento ha experimentado durante el Estado de Alarma, fruto de su interés por seguir una alimentación sana, segura y saludable. Así, en la empresa Bioprocam han sido testigos de este aumento de pedidos, hasta el punto de que prácticamente faltaba producto, ya que a partir del mes de marzo, el volumen baja considerablemente respecto a los meses anteriores.
“Sobre todo en marzo y abril se ha registrado una fuerte demanda, pero los precios no han sido mejores que en la pasada campaña”, sostiene Fernando Martín, gerente de la firma granadina. Además, han tenido que adaptarse a los nuevos requerimientos con sobrecostes, no solo en lo que a material de protección se refiere, sino también en el proceso de reorganización del almacén, lo que ha provocado una ralentización de la actividad.
«Se escalonarán las siembras de hortalizas para obtener un volumen más lineal a lo largo de toda la campaña»
Por todo ello, el objetivo de Bioprocam es normalizar su labor en la nueva situación, tanto a nivel operativo como de volumen, intentando que las producciones sean más lineales a lo largo de la campaña para evitar las puntas de sierra que les hacen bajar los precios. Porque “no se puede permitir que el ecológico se acabe vendiendo como convencional, que es lo que sucede cuando hay demasiada oferta en los mercados”, señala Martín.
Otro de los canales que más ha crecido durante el confinamiento ha sido la venta online, también en el caso de Bioprocam, donde la venta de sus productos le ha permitido tener una relación directa con el consumidor, “que repite y confía en la calidad de nuestra oferta”.
Próxima temporada
Para esta campaña, en Bioprocam esperan un importante descenso de su producción de aguacate ecológico debido a una mala floración que reducirá el volumen al menos un 25/ 30%. Sin embargo, en mango prevén obtener más kilos debido a la entrada en producción de nuevas plantaciones. En pepino, su principal producto, esperan seguir creciendo, aunque de forma más escalonada durante todo el año. Y, por último, el tomate, del que cada campaña disminuyen su superficie de cultivo debido a la crisis de rentabilidad que vive el sector por sus altos costes de producción. “Nos centramos en variedades con menor coste como el tipo rama o marmande, que requieren de menos mano de obra”, detalla el gerente al respecto.