El exito de los tropicales españoles
Mientras que el aguacate y el mango mantienen su buena racha, la chirimoya resiste, al tiempo que otros tropicales tratan de sumarse a la marca España.
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Los tropicales continúan imparables, con una demanda creciente tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, gracias a la capacidad de productores y comercializadores de mejorar la calidad del producto, ofrecerlo en su momento justo de maduración (ready to eat), lo que no solo incrementa la satisfacción del consumidor final, sino también la compra
del mismo.
Para llegar a este momento, ha sido necesario un gran esfuerzo por parte del sector: han tenido que modificar todos sus procesos productivos y de recolección en campo, con nuevos protocolos de manejo y dotarse de la tecnología necesaria para su maduración, minimizando así las posibles mermas. Pero el resultado ha valido la pena. Estamos ante un sector fuerte en España y Europa, con niveles de crecimiento imparables y precios medios de venta que superan los 2,25€/kg en el caso del aguacate y los 1,31€/kg en el caso
del mango.
También en este auge ha sido clave la decisión que el sector tomó hace ya algunos años de considerar la importación como un complemento a su actividad. Según un estudio de Rabobank Research Food & Agribusiness, el consumo de aguacate en Europa se incrementó un 150% en los últimos diez años, hasta superar las 400.000 Tn en 2016. Una cifra muy alejada de la producción media española (74.000 Tn según la Junta de Andalucía). Europa es, por tanto, un mercado altamente demandante y España no podía perder esa oportunidad. Actualmente, la campaña de importación es casi tan importante como la nacional, mucho más larga, por supuesto, y que ha permitido a las empresas españolas convertirse en proveedores los 12 meses del año, con la fidelización de clientes que ello supone. Aunque también es cierto que el sector hace una clara diferenciación entre el producto nacional o el de otros orígenes a la hora de la comercialización, preservando así el buen nombre de los tropicales españoles, y que el sector defiende bajo la marca de calidad Aguacate/Mangos de Granada y Málaga.
Sin embargo, no todo va a ser positivo. Como en otros ámbitos, la falta de recursos hídricos comienza a condicionar su desarrollo. España necesita incrementar su producción, pero la sequía y la mala gestión de los recursos existentes está provocando que se estanquen algunos cultivos como la chirimoya, mientras que otros tienden a desaparecer como el níspero.
10.500 Has
Superficie de aguacate de España, el 85% en la costa de Málaga y Granada.
25.000 Tn
La producción de mango de esta campaña. Las previsiones apuntan a que podría duplicarse en los próximos años.
Mango
Con la tendencia de ready to eat, el consumidor ha descubierto un nuevo producto.
Su limitada campaña comercial supone su mayor hándicap.
Se investigan nuevas variedades precoces y tardías.
Este tema será abordado en las Jornadas de Tropicales (abril 2018) de la Asociación de Española de Productores de Frutas Tropicales.
Aguacate
Su superficie es de 10.500 has, con una producción de 74.000 Tn.
La falta de agua parece estar limitando su desarrollo.
Algunas empresas están buscando nuevas zonas de cultivo (Portugal, Cádiz o Huelva).
Obtentores como Planasa lanzarán en breve nuevos materiales.
Chirimoya
Era el producto más atractivo y con mayor proyección, pero ahora está eclipsado por el mango y el aguacate.
Comienza a desarrollar de forma sólida la exportación.
La falta de agua supone una fuerte limitación para este cultivo.
La línea de procesados es una tendencia en alza.
Nuevos tropicales
Productos como el lichi, la papaya y el longan comienzan a desarrollarse en España.
Con presencia en todo el territorio nacional.
Suponen un complemento a los cultivos más tradicionales.
Tratan de crecer al amparo de la buena imagen de los tropicales.