Con esta operación, cuyo valor no se ha dado a conocer, Syngenta incorpora conocimientos en una actividad relacionada con la fabricación de pasta.
La firma que pasa a ser parte de Syngenta se encuentra en una localidad próxima a Bologna y sus cultivos de maíz duro cubren más de 330.000 hectáreas.
Sus principales productos son el maíz duro, el maíz común y la alfalfa, con variedades desarrolladas a través de procedimientos genéticos que contribuyen a aumentar la productividad, la resistencia a enfermedades y la adaptabilidad, entre otras características.
Según Syngenta, el mercado mundial de pasta tiene un valor anual de 16.000 millones de dólares.