En peligro el cultivo de la sandía en Valencia
La baja rentabilidad está detrás del importante descenso de hectáreas destinadas a este cultivo en la Comunidad Valenciana.
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La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha denunciado que las hectáreas destinadas en la Comunitat Valenciana al cultivo de sandía han sufrido un «severo descenso» de casi un 30 %, al pasar de 1.043 hectáreas a 743, entre 2009 y 2015, mientras los precios actualmente rozan «el ridículo».
Desde AVA-Asaja se señala que en 2016, según sus propias estimaciones, se produjo un ligero repunte que situó la superficie de sandía en torno a 1.000 hectáreas, pero este año el terreno destinado a esta fruta ha vuelto a descender de manera muy acusada y apenas alcanzará las 500.
En un comunicado, la organización agraria asegura que las causas de esta recesión «recaen en una continua falta de rentabilidad motivada por las presiones bajistas en materia de precios que viene ejerciendo de manera implacable la gran distribución».
También radican, a su juicio, «en la competencia que ejercen otras regiones de España de producción más precoz, como Andalucía y Murcia, y donde las áreas dedicadas a este cultivo sí se han mantenido en los últimos años».
Este año la campaña comenzó a finales de mayo con precios «atractivos» de entre 0,35 y 0,40 céntimos de euro por kilo para las cosechas más precoces de Andalucía y, algo después, de Murcia.
Sin embargo, según AVA, la coyuntura ha cambiado «radicalmente» en estas fechas coincidiendo con la entrada en el mercado de las producciones de sandía valenciana.
Ahora mismo, las cotizaciones a pie de campo que ofrecen a los productores oscilan entre los 0,10 y los 0,15 céntimos por kilo, un precio que «bordea el ridículo» si se tiene en cuenta que el coste que conlleva cultivar ese mismo kilo «difícilmente» baja de los 0,17 céntimos.
Algunas de las grandes cadenas de distribución ya han comenzado a presentar ofertas de venta al público de 0,29 céntimos el kilo, según la organización agraria.
La bajada de las temperaturas en los principales países europeos ha retraído la demanda y esa circunstancia «sirve también como pretexto ideal» a las grandes cadenas de compra para negociar a la baja, de manera que la rentabilidad de la campaña valenciana de sandía se encuentra «seriamente amenazada en estos momentos».
Para el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, «el arranque del verano está resultando desolador para el campo» valenciano pues «al desastre de la cebolla y la patata, con cosechas destruidas por los propios agricultores ante la falta de precio, hay que sumar ahora los problemas que comprometen la viabilidad de la sandía».
