Bonnysa pone en venta fincas valoradas en 55 M tras el desenganche de Mercadona
El proceso de desenganche como interproveedor de frutas y hortalizas de Mercadona está pasando factura a la compañía agroalimentaria Bonnysa, con sede en Mutxamel. Tras los recientes expedientes de regulación de empleo (ERE) y un plan de refinanciación de 85 millones de euros, una entidad financiera de ámbito nacional acaba de poner en venta casi medio centenar de activos cuyos titulares son diversas sociedades vinculadas con Bonnysa.
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El precio de venta global de estos inmuebles (solares industriales, viviendas y suelos rústicos), según las fuentes consultadas por Levante-EMV,se aproximan a los 55 millones de euros y la mayoría de los activos ubicados en municipios de la provincia de Alicante como Agost, Campello, Mutxamel y Xixona, entre otros. Además, también se han puesto a la venta fincas implantadas en Alzira, Sevilla y Cartagena.
El presidente de Bonnysa, Jorge Brotons, aseguró ayer en declaraciones a este diario que «si se han puesto en venta esas propiedades es una decisión que corresponde a las entidades financieras, no a la empresa».
Además de Mutxamel, Bonnysa, constituida en el año 1956, tiene sedes corporativas en Murcia, Tenerife y Almería. Durante su etapa como interproveedor de Mercadona esta corporación hortofrutícola llegó a facturar 176 millones de euros (campaña 2012/2013) y contaba con una plantilla de 3.000 trabajadores en toda España. Desde entonces, tanto su cifra de negocio como de personal han disminuido.
La desvinculación con la cadena de supermercados de Roig se produjo en 2013, lo que conllevó una profunda reestructuración de la compañía y la búsqueda de nuevos clientes. Entonces, anunció un ERE que conllevaba el despido del 5% de su plantilla actual. La empresa mutxamelera ha logrado importantes contratos con otras cadenas tanto nacionales como extranjeras con las que espera remontar su cifra de negocio, que disminuyó alrededor de un 20 % tras romper con la firma líder en España de la distribución comercial.
Proceso de adaptación
Bonnysa prescindirá de hasta 120 empleados este verano tras su cambio de modelo. La compañía anunció el pasado mes de abril un ERE para adaptarse a los nuevos ritmo de producción. La relación de Mercadona con Bonnysa comenzó en 2003. Distribuía los plátanos de Canarias, tomates y otras frutas frescas entre las que se encuentran la piña, el kiwi, la papaya y el mango.
En España, el sector del tomate sufre una situación complicada desde hace algunos ejercicios. El desplome de los precios se ha agudizado durante esta temporada y tanto los agricultores como las asociaciones y cooperativas ya hablan de una crisis estructural del cultivo que podría afectar a toda la rama hortofrutícola. Según un reciente informe de Coag, todo comenzó a complicarse con el veto de Rusia a los productos hortofrutícolas de la Unión Europea (UE). De hecho, el tomate fue uno de los productos más afectados, aunque también los cítricos, caquis, fruta de verano y granadas „ cultivos implantados en la Comunitat Valenciana„ sufren las prohibiciones de Putin.