Una década prodigiosa. SAT ROYAL

Queridos compañeros, es un honor para mí rememorar, junto a Jorge Brotons, la idea original de la creación de Fruit Attraction. Eran tiempos difíciles. La crisis financiera mundial acababa de empezar. En agosto de 2007 quiebra Blackstone, (el mayor fondo inmobiliario), seguido por Fanny Mae y Freddie Mac, y se producen en consecuencia las mayores nacionalizaciones de la historia de Estados Unidos (200.000M$). Hoy, España sigue acusando este golpe y no ha recuperado todavía el nivel de empleo y de renta per cápita del 2008.

En marzo de 2007 es reelegido presidente José Luis Rodríguez Zapatero. Y en octubre, el ministro Pedro Solbes asegura que la crisis no afectará a España. Con ese panorama de incertidumbre, decidimos poner en marcha este proyecto. La primera edición fue un éxito por el incondicional apoyo de todos y cada uno de los miembro de Fepex, y se puso de relieve que la unión podía con los mares más embravecidos.

“ Nuestros productos, ideas e imaginación luchan a brazo partido con otras culturas y tenemos que ser competitivos

España cuenta con un colectivo de profesionales productores y exportadores entre los mejores del mundo. A lo largo de estos 10 años, nos hemos perfeccionado, modernizado y diversificado. Los mercados europeos se nutren de nuestras múltiples innovaciones y hemos sabido ganarnos los favores de la clientela europea más exigente. Con esta experiencia como respaldo, estamos además abordando la conquista de nuevos mercados en Oriente Medio, Asia o China. Otro factor a destacar es que nuestra investigación está al nivel de las mejores del mundo. ¿Cuánta gente viene a visitarnos para aprender de nuestras tecnologías, ideas, variedades o formas de cultivar?

¿Cuántas compañías españolas están exportando ciencia e innovación a todo el mundo? La prueba de ello es el éxito conseguido con Fruit Attraction, fiel reflejo de lo anterior y de la pujanza de nuestra iniciativa.

Sin embargo, no podemos relajarnos. Estamos al inicio de una nueva era. Posiblemente en los próximos 10 años, la digitalización, la inteligencia artificial, nos lleven a horizontes difíciles de imaginar, sin olvidar que la competición es ahora mundial. Nuestros productos, ideas e imaginación luchan a brazo partido con otras culturas, otros mundos, y tenemos que ser competitivos en esos escenarios.

Y tenemos como competidor un país europeo, Holanda, unido, apoyado por sus autoridades, con unas infraestructuras potentes (puertos y aeropuertos) y un gran espíritu comercial. Se trata de un modelo de cambio internacional con unas armas que deben servirnos como referencia.

Sin duda entramos en un ciclo distinto. Hemos sabido triunfar, transformando la dificultad en éxito en estos últimos 10 años. Mantengamos nuestro espíritu de lucha, emprendimiento, laboriosidad y ante todo nuestros valores humanos de unión, lealtad y honradez, y respeto por la naturaleza. Con estos valores hemos triunfado en el pasado y, sin duda, esta próxima década será de nuevo la de nuestra victoria. Leguemos a nuestros hijos un mundo mejor.