Más que una fruta, un icono de superación

Hace poco tiempo que asumió el cargo de director general de Fresón de Palos, ¿supone un reto para usted mantener esa posición líder en el sector con la que cuenta la empresa?

Sin duda alguna, participar activamente en el proyecto de consolidación de una firma de esta envergadura supondrá un reto profesional apasionante al que todos los socios y empleados de la cooperativa nos entregaremos plenamente. En este sentido, nuestra principal meta es la consolidación del liderazgo obtenido por Fresón de Palos durante más de treinta años.

Respecto a la campaña del año pasado, ¿se puede catalogar como la peor de la historia de la fresa?

La campaña 2013 fue la que fue. Quien conoce el sector sabe que no existen dos campañas iguales y que, una vez finalizada una temporada, no hay tiempo para pensar en más cosas que en prepararse para la siguiente. Efectivamente, el ejercicio pasado no fue un año precisamente bueno, ni tan siquiera dentro de la normalidad, pues los factores externos incontrolables fueron especialmente perjudiciales para los intereses de los productores y comercializadores, e incluso de los propios consumidores. Pero ahora es tiempo de pensar en la recién iniciada campaña.

¿Y cómo se está desarrollando el inicio de la actual campaña?

Es pronto para hacer una previsión o pronóstico global de la campaña, si bien el comienzo se está caracterizando por una buena calidad de la fruta y unos volúmenes prematuros y mayores respecto a los de la temporada pasada. Esperemos que el clima sea favorable durante gran parte de la campaña y que consigamos poner en los mercados una fresa de gran calidad para nuestros clientes y consumidores, desde las primeras hasta las últimas semanas.

Fresón de Palos se distingue en los mercados por esa calidad, ¿en qué medida esto le hace tener una situación ventajosa en los mercados?

Efectivamente, la calidad es una constante en nuestra entidad desde sus inicios. La cooperativa fue pionera en producción integrada y en la instauración de normas hoy ya estandarizadas como Global Gap. Sin duda alguna, tener o no tener un proceso de calidad certificado y un sistema de trazabilidad garantizado, más que una ventaja competitiva, supone ya una barrera de entrada obligatoria a la práctica totalidad de los mercados.

La preocupación por alcanzar el residuo 0 ha llegado a Fresón de Palos, ¿cómo lo desarrolláis?

Fresón de Palos lleva a cabo una agricultura responsable y se encuentra actualmente a la vanguardia en lo que a producción sin residuos se refiere, contando desde hace varias temporadas con un protocolo técnico interno al respecto, aplicado en estos momentos a más de 50 hectáreas, y estando acogidos también a la certificación Zerya.

La diversificación en berries se está implantando en el sector para obtener mejores resultados, ¿habéis apostado por ella?

La diversificación hacia otro tipo de berries ha sido una constante en el sector durante los últimos años. Pero Fresón de Palos ha concentrado sus esfuerzos de producción, comercialización y comunicación sólo en las fresas, siendo esta estrategia la que le ha hecho posible posicionarse como la primera referencia del sector en cuanto a cuota de mercado y a nivel de marca entre los clientes directos y los consumidores finales. No obstante, la investigación de nuevas vías de crecimiento mediante la inclusión de otros cultivos podría estar dentro de nuestro plan estratégico a medio y largo plazo.