La corta cosecha andaluza en fruta de hueso ensombrece el auge exportador
Se estima que la producción baje en la actual campaña en Andalucía entre un 5% y un 15% por las lluvias.
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El sector de la fruta de hueso se debate estos días entre la alegría por los buenos resultados correspondientes a las exportaciones del año pasado y la preocupación por una cosecha que no va a ser de las mejores. Y en esta coyuntura, y tras años de negociaciones, por fin China da un paso al frente y autoriza la exportación de melocotones y ciruelas españoles, importante acicate para el sector que sigue sufriendo el veto ruso.
Esta noticia supone una inyección de ánimo para una campaña de comercialización que ha comenzado con «una tónica de ralentización de la demanda, no habiendo grandes volúmenes de fruta todavía y, sin embargo, el mercado se encuentra un bastante parado para todos los productos salvo el paraguayo que en éstos momentos presenta un bache de producción», explicó el responsable sectorial de fruta de hueso de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Antonio Tejada.
El pasado abril, el Gobierno central firmó un acuerdo que convierte a España en el primer país que podrá vender sus frutas de hueso a China. Y la pasada semana la Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena de la República Popular de China (Aqsiq) comunicó a la Embajada de España en China la decisión de autorizar las exportaciones de melocotones y ciruelas españoles a los mercados chinos. De hecho, las exportaciones de estas frutas pueden empezar de manera inmediata en la campaña actual, una vez que España ha demostrando en China la solidez y seriedad del sistema de control y certificación fitosanitaria de su producción, informó el Ministerio de Agricultura , Alimentación y Medio Ambiente.
La Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena de la República Popular de China ya ha publicado en su página web los huertos, almacenes e instalaciones de frío autorizadas. Hasta el año 2014 España no empezó a exportar frutas a China, y sólo estaban autorizados hasta ahora los cítricos, cuyas ventas alcanzaron en 2014 las 1.150 toneladas, con un importante ritmo de crecimiento. En 2015 llegaron a las 3.218 toneladas, y sólo en el primer trimestre de 2016 ya se exportaron 2.270 toneladas.
Respecto a la evolución del total de las exportaciones desde Andalucía a todos los mercados de frutas de hueso en 2015, fue favorable con un volumen de 83.200 toneladas, entre melocotón, nectarina, albaricoque y ciruela, por valor de 126,8 millones de euros, lo que supone un incremento de los ingresos del 9,3% respecto al año anterior, que ascendió a 116 millones de euros. Esta cantidad supone el 12% de las exportaciones españolas de estas frutas, según fuentes de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural.
Sevilla lideró el año pasado las ventas de frutas de hueso al extranjero, con más de 60.700 toneladas valoradas en 100,8 millones de euros, un 4% más que en 2014. Por provincias, le siguen Huelva, con 12.200 toneladas por valor de 14,3 millones de euros; y Almería, desde donde se exportaron 7.512 toneladas de frutas por 8,4 millones .
A un poco de distancia están las provincias de Málaga, con casi 1.800 toneladas exportadas por 1,8 millones; Jaén con 700.000 euros y 549 toneladas; Córdoba con 463.000 euros y 333 toneladas, Cádiz con 160.000 euros y 116 toneladas y a la cola Granada con 75.000 euros y 73 toneladas.
La nectarina es la fruta de hueso más demandada en el exterior, con más de 47.300 toneladas vendidas en 2015, lo que generó una facturación de 70 millones de euros. Tras ellas se sitúan los melocotones, de los que se vendieron cerca de 22.800 toneladas con un valor que roza los 38 millones; 7.000 toneladas de ciruelas que generaron y 7,7 millones de euros y algo más de 6.000 toneladas de albaricoques valorados en 10,7 millones de euros.
En una reciente visita a las instalaciones de Royal SAT en San José de la Rinconada (Sevilla), la consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Carmen Ortiz, insistió en la necesaria apuesta por la internacionalización de la producción frutícola, como vía para «mejorar la rentabilidad de la actividad agraria y avanzar en la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio para el sector de las frutas andaluzas, castigado injustamente por el veto ruso».
A primeros de junio se ha publicado el nuevo reglamento sobre las ayudas por el veto ruso, una prolongación del anterior periodo, con alguna salvedad como la inclusión del caqui y las cerezas y la reducción de lo cupos en un alto porcentaje.
La ayuda está dirigida a las organizaciones de productores y a los agricultores que no sean miembros de dichas organizaciones. Algunos de los productos susceptibles de acogerse a este reglamento son tomates, zanahorias, coles, coliflores, ciruelas, uvas frescas de mesa, naranjas, clementinas, mandarinas, melocotones, nectarinas y caqui, entre otros productos.
El periodo de aplicación de estas medidas será del 11 de junio de 2016 al 30 de junio de 2017, en la fecha en la que se agote el cupo o bien si Rusia cambia su postura.
La situación de Rusia obliga a los exportadores a intensificar la búsqueda de nuevos mercados exteriores, lo que ha conseguido Royal SAT, una de las dos únicas entidades andaluzas que se han registrado para exportar fruta de hueso a China. Royal SAT cuenta actualmente con 13 socios que, en global, suman una superficie de cultivo de cerca de 1.200 hectáreas de frutas de hueso, en las que se produjeron en 2014 un total de 27,8 millones de kilos valorados en más de 38 millones de euros. Esta entidad se dedica, principalmente, a la producción y comercialización de fruta de hueso, si bien también cuenta con superficie dedicada a frutos rojos como arándano, fresa y frambuesa.
En cuanto a la actual cosecha de fruta de hueso, los servicios técnicos de Cooperativas Agro-alimentarias de España prevén una reducción del 3,6% en el conjunto nacional respecto al año pasado, con un total de 1.598.931 toneladas, dato negativo aunque la cantidad es superior a la media registrada en las últimas cinco campañas.
Los mayores descensos se van a producir en la ciruela, de un 11%, y en la nectarina, un 5% menos. Se salva el paraguayo, la única fruta cuya recolección será mayor que el año pasado.
De la cosecha de 1.598.931 toneladas, la nectarina supone la variedad mayoritaria, con el 33% de la cuota total de fruta de hueso española, seguida del melocotón (18%), paraguayo (17%), pavía (16%), ciruela (8%) y albaricoque (6%). Todas las categorías van a sufrir caídas de producción, según las estimaciones de Cooperativas Agro-alimentarias, que van desde el 11% de la ciruela a cerca del 5 % en melocotón, nectarina y pavía; el albaricoque experimentará un ligero retroceso del 1,5%, mientras que el paraguayo es la única variedad que registra un incremento respecto a la campaña anterior, concretamente del 4,8%.
En el caso de Andalucía, el responsable sectorial de fruta de hueso de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Antonio Tejada, señaló que en las zonas de producción temprana, como es nuestro caso, las temperaturas inusualmente cálidas del invierno desencadenaron un adelanto en la floración, que se ha alargado más de lo habitual, debido a unos días de frío que llegaron en ese momento y que también retrasaron el inicio de floración. Esto ha provocado una merma de producción que puede estar entre un 5% al 15%.
Fuente: Diario de Jerez