Entra en vigor el veto de Ucrania a las hortalizas de hoja españolas

El pasado 18 de febrero, el director de Inspección Fitosanitaria de Ucrania, Vitali Romanchenko, procedió a firmar la declaración de veto a las importaciones de verduras de hoja procedentes de España, el cual entró en vigor, de forma oficial, a partir del 1 de marzo de 2016.

La razón de esta medida, según anunció Rmanchenko, se debe a la «repetida violación de los protocolos fitosanitarios por parte de los productos españoles en los controles fronterizos».  La decisión del Servicio Federal Fitosanitario y Veterinario de Ucrania afecta a brócoli, coliflor, lechuga, endivia, escarola y col, así como otras variedades de Baby Leaf para ensaladas que los exportadores españoles suministran a Ucrania tanto en fresco como en refrigerado.

Las hortalizas españolas llegaban hasta ahora a Ucrania directamente desde España o, de forma indirecta, a través de importadores e intermediarios europeos. «Sabíamos que esto podría pasar. Hace alrededor de dos semanas tuvimos una pequeña incidencia con las autoridades ucranianas por alguna partida con leve presencia de trips. Las inusualmente altas temperaturas de este invierno tanto en Murcia como en Almería –principales zonas de producción en España– han hecho que esta campaña proliferen más estos pequeños insectos. No obstante, esto no significa que el producto no sea apto para el consumo», cuenta Jordi Estrada, del departamento comercial de Primaflor, una de las empresas afectadas por estas medidas.

España es la principal productora de este tipo de hortalizas en Europa durante el invierno, por lo que Ucrania tendrá que recurrir a países terceros en el norte de África. «Si España no es apta para exportar a Ucrania, falta por ver si los países de fuera de la UE pueden aportarle a Ucrania la seguridad alimentaria que reclaman», señala el exportador.

«Teniendo en cuenta que el porcentaje de exportaciones directas a Ucrania es poco significativo a nivel sector en comparación con los envíos a otros mercados europeos, no podemos hablar de pérdidas importantes», explica. «Falta por ver cómo nos afectará indirectamente», añade.

Fuente: www.freshplaza.es