Mercalicante reduce en más de un 53% su consumo de agua 

Mercalicante ha logrado reducir en un 53,3% su consumo de agua desde que en el año 2010 asumió la cesión de la gestión de la red de agua. Con esta acción, se consigue cumplir con uno de los objetivos medioambientales que se contemplan dentro de su plan estratégico 2013-2015, según ha ratificado oficialmente la empresa certificadora IVAC después de proceder a realizar una auditoría medioambiental.

En relación al consumo de agua registrado el pasado año se ha  producido una disminución del 2,34%, lo que supone un ahorro de 72.000 litros de agua respecto a 2013. Para obtener este buen resultado, se ha potenciado la detección de posibles fugas de agua por medio de sistemas de telelectura y la revisión periódica de instalaciones, así como el ahorro en el riego controlado y el goteo en las zonas verdes de la unidad alimentaria.

Por otro lado, la tasa de reciclado ha llegado a superar el 24%. En Mercalicante se han recogido 620 toneladas de residuos totales durante 2014, de las que 153 toneladas de plástico de envases fruteros, cajas de madera, palets y cartón han sido recicladas. El volumen de residuos indiscriminados generado en comparación con la cantidad de mercancías que se han comercializado en el mercado mayorista de frutas y verduras ha descendido un 1% respecto al año anterior.

El director general de Mercalicante, José Ramón Sempere, ha señalado que “desde el parque alimentario tratamos de potenciar la regla del reciclado, la reutilización y la reducción de residuos entre nuestros empleados, empresas establecidas en nuestras instalaciones y nuestros proveedores”.

A pesar de haber aumentado los servicios en determinadas zonas del parque alimentario, se ha mantenido un consumo eléctrico de instalaciones propias y luminarias generales similar al del año anterior, que ha rondado los 493.000 kilowatios anuales. Sempere ha recordado que “el consumo eléctrico de Mercalicante procede en su totalidad de fuentes de energías renovables”.

El mantenimiento del consumo energético ha sido posible gracias a los sistemas de eficiencia energética instalados en el recinto como los sensores de presencia, la detección precoz de averías y la sustitución de lámparas convencionales por luminarias LEDs y lámparas de bajo consumo.

El descenso en el consumo de recursos no solo ha recaído en el consumo de agua. También se ha extendido a otros materiales como el papel de oficina, en el que se ha bajado el consumo en un 44,4% respecto a 2013. Asimismo, se ha registrado un gran descenso en el número de cartuchos de tinta de impresoras utilizados debido al mayor uso de impresoras comunes y a la eliminación de las impresoras individuales.