La sequía y la deslocalización reducen la exportación hortofrutícola alicantina

La evolución de las exportaciones hortofrutícolas de la Comunitat Valenciana y del conjunto de España dibujan un itinerario completamente contrario a la de la provincia de Alicante. Desde principios de año (el Ministerio de Economía y Competitividad y el ICEX divulgaron el viernes el dato correspondiente al período enero-septiembre), la venta al exterior de fruta y hortaliza fresca registró un fuerte repunte en la autonomía y el país del 13% y el 14% en valor, casi el mismo porcentaje de disminución que anota el sector alicantino. La patronal nacional Fepex y la alicantina Fexphal, al frente de la cual está el consejero delegado de la agroalimentaria Bonnysa de Mutxamel, Jorge Brotons, lo achaca, sobre todo, a la atroz sequía que se ha sufrido la provincia hasta hace bien poco.

En los nueve primeros meses del año, las empresas agroalimentarias de la provincia han vendido en el exterior a través de las aduanas internas un total de 353 millones de euros en valor (solo un 1,3% más) en frutos y frutas frescas y 189 millones de euros en legumbres y hortalizas frescas. Si se tiene en cuenta, como apuntan desde la dirección provincial del Icex y de las propias patronales Fepex y Fexphal, que en la partida arancelaria 08 de frutas y frutos sin conservar se incluyen también los frutos secos (más de 200 millones de euros hasta junio en importación de California, una parte de los cuales después se reenvía a Europa), la disminución de la venta exterior de fruta fresca es también muy notable en la provincia.

Por contra, en la Comunitat Valenciana el valor de lo exportado en frutas y hortalizas se cuantifica hasta septiembre en 2.305 millones de euros (un 13% más). En toda España, la exportación hortofrutícola creció en el mismo período un 8% en volumen de toneladas y un 14% en dinero, hasta 8.673 millones de euros.

El representante de los empresarios del sector en toda España y la provincia, Jorge Brotons, atribuye el mal dato a tres factores fundamentales y ninguno de ellos es el veto ruso que sufrió el pasado año el sector en sus envíos a la antigua Unión Soviética a raíz de la posición de Bruselas respecto al conflicto en Ucrania. Según Brotons, la sequía es el elemento más a tener en cuenta en la bajada de producción de las principales hortalizas de temporada de verano: tomate, berenjena, pimiento y calabacín, entre otros.

Anecoop compra en origen

Un segundo factor está relacionado con lo que Jorge Brotons denomina la «deslocalización interna» de la producción. Hay importantísimos operadores, como la cooperativa de primer grado Anecoop (ocho empresas internacionales y cuatro delegaciones en el territorio español, con presencia activa en nueve provincias) que compran la mercancía «en origen» a productores locales alicantinos, pero después la pasan por las Aduanas de Valencia, donde tienen sus instalaciones principales camino de los mercados europeos o de otros continentes. Otra merma en el volumen total registrado en las Aduanas de Alicante.

El tercer elemento que baraja Brotons es la «fuerte caída» de la exportación de uva de mesa con y sin denominación de origen Vinalopó. Fepex no tiene todavía suficiente información sobre el retroceso, aunque un motivo puede hallarse en la cada vez mayor competencia que sufren los mercados europeos con uvas procedentes de terceros países, principalmente Latinoamérica e incluso el Magreb. Para Fepex el crecimiento de la exportación es imputable principalmente al buen comportamiento de la demanda de consumo en el conjunto de la UE, mercado natural para el sector español y con crecimientos del 17% en el caso de Alemania, 16% en el caso de Reino Unido y 15% en Francia. Fepex resalta un mayor crecimiento en valor por los nuevos formatos.

Fuente: La Verdad.