La seguridad y el control de los alimentos, claves para la gran distribución

Se trata de poner en valor las normas de calidad y pautas que sigue la gran distribución para que el cliente que cruce las puertas de una gran superficie cuente con la seguridad de que los alimentos que va a adquirir son seguros, fiables y cumplen toda la normativa vigente. Así lo explica el director de Calidad y Seguridad Alimentaria del Grupo La Despensa, David García, “para nosotros la Seguridad Alimentaria se sustenta en las bases fundamentales que establece la OMS para la inocuidad de los alimentos: limpieza, separación de los alimentos crudos y cocinados, cocinas completamente, mantener los alimentos a temperaturas seguras y utilizar agua y materias primas seguras”. En este sentido declara que “estas bases fundamentales son compromiso de todos, tanto del consumidor como de nosotros en la distribución; para cumplirlas hace falta que todos pongamos de nuestra parte”.

Afirma que “nosotros tanto en los productos envasados como en el producto fresco cuidamos mucho su procedencia, nos ajustamos a la normativa y, por supuesto, hacemos que el proveedor también se ajuste a la misma; la clave es dar la máxima información al consumidor para que se sienta seguro con lo que se está llevando a casa”.

Se presta especial atención a la carne y el pescado, “lo adquirimos y revisamos exhaustivamente en qué estado está la mercancía, su temperatura, condiciones…, lo primordial es evitar intoxicaciones; cualquier atisbo de mal estado, temperatura inadecuada, malas condiciones en su transporte, lo descartamos inmediatamente, aunque he de decir que esos casos se dan con poquísima frecuencia”. En el pescado el aspecto más delicado son los sulfitos, “se trata de un producto que provoca alergia y en el caso de que lo lleve, se debe indicar en lugar bien visible”.

Formación para dar la máxima información

La premisa fundamental para el Grupo La Despensa es la total información al consumidor, “lo que siempre le decimos es que revise el etiquetado y si tiene algún tipo de alergia, que preste especial atención a este tema”, para ello el cliente cuenta no sólo con la información que aparece en las etiquetas de los productos, sino también con información específica referente a los alérgenos y todos sus profesionales están formados para ofrecer al cliente que lo precise todo lo que necesiten, “todos nuestros trabajadores tienen formación específica, ya sea de carnicería, pescadería, panadería o bollería o productos envasados; somos conscientes de que cada vez hay más alérgenos, que la gente demanda información específica y nosotros queremos ofrecérsela”.

Asimismo el Grupo lleva a cabo una serie de controles para garantizar precisamente eso, la Seguridad Alimentaria, “en primer lugar valoramos la ficha técnica donde se describe el producto (ingredientes, aditivos, alérgenos, fecha de caducidad, envase para uso alimentario…), seguidamente hacemos controles a nivel nuestro, por ejemplo la temperatura de los camiones que nos traen la mercancía, para que el género no se dañe, la limpieza tanto de los camiones como del almacén, y por supuesto el orden; tomamos muestras aleatorias y, sobre todo, que no se rompa la cadena de frío y el trato que le dé el personal a la mercancía”, afirma David García, quien matiza que “me refiero fundamentalmente a que cada profesional tenga delimitadas sus funciones, es decir, que el personal de carne, por ejemplo, sea el único que manipule este producto”.

“Y por supuesto, pendientes de corregir fallos y abiertos a mejorar; es muy enriquecedor reunirte con otras grandes superficies que te informan, que te dan su punto de vista, que proponen cosas nuevas y que tú propongas tu modo de trabajo…”.

Lo que no se ve y lo verdaderamente importante, el control

La Ley 1169/2011, que es la Ley del Consumidor, obliga a ofrecer a éste toda la información que precise, tanto de orígenes de los productos como de alérgenos y registro sanitario, “nos obliga a indicar todo, a dar la máxima información que el producto pueda contener, y consideramos que eso es muy positivo tanto para el cliente como para nosotros”, afirma David García.

¿Carencias?, “siempre las hay”, matiza David García, “tanto en nuestros supermercados como en otros; en mi opinión la más importante es que la citada Ley del Consumidor entró en vigor el pasado mes de diciembre y nos ha pillado a todos un poco el toro, pero lo más importante es que estamos trabajando todos rápido y con esfuerzo para ponernos al día cuanto antes y ofrecer un servicio de máxima calidad al consumidor”.

En la jornada del próximo 25 de junio en Tomelloso el responsable de Calidad y Seguridad Alimentaria del Grupo La Despensa hablará sobre la información al consumidor -“yo le diría que preste especial atención al tema de los alérgenos, a la caducidad, a que sea un producto fresco y, siempre, ante cualquier duda, que pida la información necesaria a los empleados”- y de los controles que desde aquí hacemos para que el producto llegue en el mejor estado posible, “es lo que no se ve y es lo verdaderamente importante”.

En cualquier caso, David García afirma con satisfacción que “en el Mes de la Seguridad Alimentaria puedo afirmar con rotundidad que el consumidor puede sentirse seguro, porque ahora los criterios que se siguen atienden a la máxima calidad y el máximo control; la cocina de nuestros clientes está más que segura”.

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