La Rioja convoca ayudas para modernizar el sector agrario por 7,3 millones de €

Durante este año de transición, «el Gobierno de La Rioja ha decidido convocar unas ayudas que son fundamentales para mejorar la productividad, ser más eficientes y respetuosos con el medio, y garantizar el relevo generacional», ha indicado Nagore, quien ha precisado que el importe de las ayudas es similar al de otros años.

Este esfuerzo de la administración autonómica, ha dicho, también responde a la petición realizada por el sector y «al buen comportamiento del agro en la economía riojana, pese a la complicada situación de crisis que se ha vivido».

La Rioja destinará este año 4,7 millones de euros para apoyar las inversiones de mejora, mientras que los jóvenes que quieran constituir una empresa agraria podrán beneficiarse de una partida de 2,6 millones.

Nagore ha recordado que la agricultura supone el 5,9 % del Valor Añadido Bruto de la economía riojana, algo más de tres puntos sobre la media nacional y sólo superado por Castilla-La Mancha, Castilla y León y Extremadura; a lo que ha sumado que la alimentación y la elaboración de vino copan un elevado porcentaje de la cifra de negocio de la industria en la comunidad riojana.

Se ha referido al balance de la ejecución de estas líneas de ayuda en el programa que acaba de cerrarse, en las que el Gobierno de La Rioja ha apoyado con 30,3 millones de euros las inversiones realizadas por 2.096 agricultores y ganaderos riojanos para modernizar sus explotaciones durante los últimos seis años.

Esta línea de ayuda, que es una de las que mayor dotación económica tenía dentro del Programa de Desarrollo Rural 2007-2013, ha permitido la puesta en marcha de proyectos de mejora con una inversión conjunta estimada de 79,1 millones de euros, ha afirmado.

Ha calificado de «significativo» y «alentador» que la mitad de los beneficiarios de la medida sean menores de 40 años, dado que se favorece el necesario relevo generacional del sector, la mejora de la rentabilidad económica en las explotaciones y el asentamiento de población en el medio rural.

El perfil medio de los preceptores de estas ayudas es el de un agricultor de menos de 50 años, dedicado al cultivo de cereal o la viña o mixto, que accede a estas convocatorias para la adquisición de maquinaria, con el fin de mejorar sus condiciones de trabajo y una gestión de los recursos más eficaz.

«Persiste un alto grado de individualización en el agricultura riojana y creemos conveniente impulsar el asociacionismo de cara al próximo periodo», ha señalado Nagore, por lo que se han establecido fórmulas de financiación para entidades asociativas agrarias y otras agrupaciones que faciliten inversiones en inmovilizado no productivas que sirvan de apoyo a las explotaciones agrarias.

El 11 % de los beneficiarios reside en zonas consideradas como desfavorecidas, la mitad de las explotaciones de agricultura se localizan en Rioja Alta y las ganaderas se reparten en las tres zonas.

La mayoría de beneficiarios pertenecen al sector vitivinícola, aunque es en el sector cerealista, en proceso de modernización, donde se realiza una inversión mayor, ya que las actuaciones son más cuantiosas, de acuerdo con sus datos.

La Consejería de Agricultura ha recibido cada año una media de 50 solicitudes de jóvenes que querían ejercer la actividad agraria, excepto el año pasado, en el que se duplicaron y se amplió la partida presupuestaria para atender a los que cumplían los requisitos.

Esta línea de ayuda ha facilitado la creación de 301 empresas agrarias durante los últimos seis años, un 72 % de las cuales pertenece al sector agrícola.

Respecto a los beneficiarios de las ayudas, un 80 % de los jóvenes que se incorporan son hombres y, de ellos, un 46 % tiene menos de 25 años, el 35 % tiene entre 26 y 35 años y resto, hasta 40; mientras que, entre las mujeres solicitantes, un 13 % es menor de 25 años y un 51% tiene de 26 a 35 años.

Por sectores, uno de cada tres nuevos agricultores se instalan en explotaciones vitivinícolas, aunque llama la atención el número de primeras instalaciones ganaderas porque, además de fijar la población en la sierra, han contribuido a revitalizar un sector especialmente afectado por el envejecimiento que afecta al campo.

Un 41 % de las explotaciones agrícolas inicia la actividad en Rioja Alta, el 39 % en Rioja Baja y el 20 % en Rioja Media; y las explotaciones ganaderas están vinculadas a la sierra y se establecen en Rioja Media un 43 % y en Rioja Alta un 30,5 %.

La subvención recibida se destina, en un 37 % de los casos, a la adquisición de tierras y de maquinaria en un 31 %; y, del volumen total de la inversión, un 63 % corresponde a fondos públicos y un 37 % a la iniciativa privada.