La papaya pide paso en la Axarquía como opción a otros subtropicales

La pasada campaña del mango en la comarca de la Axarquía generó marcas históricas en Europa, con una producción que rompió la barrera de los 20 millones de kilos recolectados. Esta fruta subtropical tiene mayor rendimiento frente al aguacate, pero nunca alcanza los mismos precios por kilogramo en origen.

Una y otra variedad se han convertido en reinas de las explotaciones al aire libre en la Costa del Sol más oriental, pero ya hay agricultores que se han puesto a trabajar en una tercera vía dispuesta a abrirse camino por reunir mayores beneficios a medio y largo plazo: la papaya.

Un grupo de empresarios de la localidad axárquica de Torrox ya pueden presumir de ser los pioneros de esta nueva variedad subtropical. Hace unos días regresaban de tierras almerienses, cargados de ideas para propiciar que los invernaderos tan típicos de la Axarquía más oriental alberguen bajo su cálido plástico los primeros cultivos de papaya.

Álvaro Bazán, uno de estos agricultores, se muestra ilusionado con las recetas que ha podido descubrir para que la papaya pueda algún día ser otra reina más entre las especies de origen subtropical que lleven hasta otros continentes la etiqueta de la Axarquía malagueña.

«Estamos empezando. Quiero en una primera fase desarrollar un cultivo experimental de poco más de 2.500 metros cuadrados. En estas fechas podemos decir que ya hay una finca en marcha, dos con las plantas en los semilleros y tres más que han recibido, en el caso de sus propietarios, las indicaciones necesarias para ponerse en marcha. Tampoco es que en otras zonas de Andalucía sea conocida la papaya. En Almería, por ejemplo, tampoco hay muchos agricultores con formación específica para hacer rentables sus fincas. Allí también hay unos pocos que son pioneros como nosotros», argumenta Bazán.

Este torroxeño recuerda que la papaya desde el punto de vista del cultivo ofrece «una elevada producción», una demanda cada vez más creciente de papaya elaborada en España, «debido al éxito que tiene la recolección en su punto de madurez, la cercanía a los mercados», y también es demandada con producción en Europa, como otros subtropicales malagueños, «por las garantías sanitarias que arroja».

Pero no sólo destaca la papaya por estos aspectos, también podría arrebatarle clientes a los aguacates o mangos por «las propiedades beneficiosas para la salud que atesora». ¿Cuál es la dificultad añadida a esos beneficios? Que para su cultivo es «más exigente que el aguacate o el mango en cuanto al clima ideal, de manera que debe cultivarse en invernadero para que sea rentable».

Las primeras fincas no sólo se localizarán en Torrox, sino que se han integrado a este cupo de pioneros otros jóvenes agricultores de núcleos colindantes pero pertenecientes al término municipal de Vélez Málaga, como son los casos de Lagos y Mezquitilla.

Domingo Medina tiene su parcela experimental en la primera de esas dos localidades y también remarca lo que supondrá la papaya como alternativa a los cultivos hortofrutícolas bajo plástico: tomate, judía, pimiento o pepino.

Al respecto, Álvaro Bazán señala que en otros enclaves europeos es posible encontrar esas variedades, pero no ocurre lo mismo con los subtropicales. Otro aspecto que unos y otros ya tienen apalabrado es el proceso de comercialización. En algunos casos estos agricultores ya son socios de Trops y de esa manera han podido constatar que la cooperativa axárquica está dispuesta a poner en sus cauces de venta las primeras papayas cultivadas y clasificadas en suelo europeo.