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Cajamar analiza el cultivo de sandía al aire libre

Un estudio de la entidad destaca que el primer paso para garantizar el éxito en una plantación es una correcta elección de la variedad.

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El Centro de Experiencias de Paiporta (Valencia) de Cajamar Caja Rural ha publicado en su boletín informativo un exhaustivo análisis del cultivo de sandía al aire libre, que recoge que el primer paso para garantizar el éxito en una plantación es una correcta elección de la variedad a utilizar.

También explica que en zonas cálidas de gran precocidad las fechas recomendadas para realizar las siembras para plantaciones rondan finales de febrero, mientras que en zonas de precocidad media las plantaciones suelen realizarse desde finales de marzo a principios de abril. En aquellas zonas de clima más continental, las plantaciones es recomendable hacerlas durante el mes de abril y mayo. «En estos dos últimos casos todavía es pronto para sembrar y habría que esperar a final de febrero o principios de marzo».

Este centro de Cajamar ahonda en las diferentes variedades de sandía con diferentes tamaños, formas, colores de piel, de pulpa y con presencia o ausencia de semilla. «Fruto de las experiencias realizadas a lo largo de los años en Fundación Cajamar Comunidad Valenciana, proponemos en función de los resultados obtenidos, algunas de las mejores variedades dentro de cada uno de los tipos», matiza: sandía rayada sin semillas y pulpa roja, sandía rayada sin semillas, pulpa roja y calibre medio, sandía rayada sin semillas, pulpa roja y calibre mini, sandía oscura sin semillas y pulpa roja, sandía oscura con semillas y pulpa roja, sandía rayada micropepita y pulpa roja, sandía rayada sin semillas y pulpa amarilla.

«En sandía es muy recomendable utilizar planta injertada sobre calabaza para prevenir enfermedades del suelo. Siempre que se utilice planta injertada tenemos que ponerla en campo con el pie de sandía cortado para evitar diversos problemas fitopatológicos», recoge el documento. En variedades sin semillas será necesario e imprescindible intercalarlas en campo con plantas polinizadoras (variedades con semillas) para poder obtener cosecha. Si no fuera así, no obtendríamos cosecha alguna, ya que el polen de las variedades sin semillas no es fértil, ahonda el informe.

Fuente: www.elalmeria.es

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