La reconversión varietal es necesaria para seguir en el mercado
Naturcrex, como referente en fruta de hueso, sigue inmerso en su proceso de reconversión optimizando sus producciones y a su vez opta por diversificar a kiwi, kaki y castañas para ofrecer un mayor servicio a sus clientes durante todo el año, como señala Antonio Chavero, su consejero delegado.
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Gracias a las buenas perspectivas de producción de fruta de hueso que hay para esta campaña, la firma Naturcrex podrá atender a toda su cartera de clientes, ofreciendo el volumen de años anteriores, 45.000 Tn en lugar de las 34.000 Tn obtenidas en el ejercicio 2013. Así, este año no se dará la merma del 20% de producción de ciruela del ejercicio anterior, y además, desde Naturcrex esperan un mayor volumen de fruta debido a la incorporación de nuevas plantaciones en Huelva, Sevilla y Murcia.
La firma, que basa su modelo de negocio en la unificación de productores para comercializar de forma conjunta, continúa ampliando sus líneas de trabajo y como novedad, va a incorporar próximamente otros productos como kaki, kiwi y castañas para mantener la actividad comercial durante todo el año. Pero lo harán sin dejar de ser líderes y una referencia en el sector de fruta de hueso, esforzándose por responder a las demandas actuales, continuando con su plan de reconversión varietal que iniciaron hace cinco años con el objetivo de ser más competitivos y ofrecer la óptima calidad. “No hay cabida en el mercado para las variedades que se han quedado obsoletas”, explica el consejero delegado de Naturcrex, Antonio Chavero.
En este sentido, afirma que existe una tendencia en variedades hacia la búsqueda de aquellas con sabor, color y larga vida comercial, es por ello que el sector prioriza las buenas técnicas agrícolas a la presentación del producto. En relación a la conservación de la fruta, resulta fundamental para la exportación a mercados extracomunitarios, y es uno de los retos del sector de fruta de hueso extremeño, que ya alcanza destinos importantes pero al que aún le quedan grandes posibilidades como China y el lejano Oriente con la ciruela. Es pues necesario seguir trabajando en la innovación de soluciones poscosecha y en la legislación de productos fitosanitarios permitidos: “El consumidor europeo adquiere en invierno productos de terceros países sin apenas control fitosanitario, mientras a nosotros nos imponen requerimientos exhaustivos para exportar, es absurdo”, señala Chavero al respecto. Para solventar estas trabas, los principales representantes del sector y gubernamentales celebran citas anuales para establecer posibles medidas, que esperemos den sus frutos pronto.
