Diversificando su oferta para adaptarse a un entorno competitivo. HORTALIZAS CHIPIONA
Hortalizas Chipiona trabaja con variedades y tipos diferentes de zanahoria teniendo en cuenta cada momento de la campaña para tener siempre la mejor calidad y la máxima rentabilidad.
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La producción de commodities como zanahorias implica un doble reto: conseguir la máxima calidad y hacerlo a precios competitivos. Esta es la máxima que marca el trabajo de Hortalizas Chipiona que se esfuerza cada campaña en superarse en productividad para poder tener un mayor margen de beneficio. Hemos visitado sus instalaciones para ser testigos del intenso movimiento que en plena campaña hay en sus almacenes.
Con una producción que rozará las 30.000 toneladas esta temporada, sobre todo de zanahoria de manojo e industria, aparte de las de granel, esta empresa gaditana conoce muy bien las necesidades del mercado y sabe adecuarse a ellas gracias a una planificación de cultivos que combina variedades y tipos de producto para obtener siempre las mejores hortalizas y el mayor rendimiento. En materia de variedades, su gerente Javier Castellano, asegura que “hay que diversificar porque todas las variedades ofrecen algo bueno”. En cualquier caso, pese al esfuerzo de las casas de semillas hay algunas cuestiones que mejorar como “el espigado, la resistencia a enfermedades o la adaptación al medio porque las tierras están cada vez más agotadas”.
Producciones más sanas y más ecológicas
Aunque aún no producen zanahoria ecológica como tal, Javier Castellano asegura que están muy cerca y no lo descartan en el futuro. “Todos nuestros productos cuentan con las certificaciones más exigentes en cuanto a materias activas, residuos, trazabilidad y controles de seguridad alimentaria”, según el gerente de Hortalizas Chipiona, quien afirma que la tendencia de consumir productos cada vez más sanos está al alza, no sólo fuera de España, donde nos llevan años de ventaja. Al final, de lo que se trata es de ofrecer los productos que demanda el consumidor y éste quiere comer mejor y más sano; de ahí que Castellano también augure éxito a variedades tipo snack que ya están comercializando algunas casas de semillas y que en su empresa no descartan probar. Al final, como indica Castellano, “manda el lineal y los productores nos tendremos que ir adaptando, cada uno a nuestro ritmo”.
El futuro de este sector es complejo y en el horizonte hay retos como la competencia china, que está produciendo zanahoria de calidad y a unos costes mucho más bajos. Aunque la distancia que existe entre este país y Europa no implique un reto inminente, Javier Castellano manifiesta su preocupación y en su empresa ya están trabajando para que el futuro no les pille desprevenidos, “apostando por este producto, dando el mejor servicio y la máxima calidad y mostrando la fiabilidad y la solvencia de la empresa como principal garantía para nuestros clientes”.
Beatriz Peña.