OPAs y cooperativas confían en que la retirada de ciruelas dé fluidez al mercado
El sector agrario ha valorado la retirada de otras 500 toneladas de ciruela, autorizada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), y confía en que contribuya a la fluidez del mercado, en un momento de exceso de oferta y de contracción de la demanda.
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La organización agraria UPA avanzaba ayer que el Ejecutivo había aceptado esta demanda de los productores, y el Magrama lo ha confirmado hoy mismo a través de un comunicado.
El responsable de sectores agrícolas de UPA-UCE Extremadura, Pepe Cruz, ha recordado que el reglamento UE 2016/921 recoge medidas de apoyo para sectores afectados por perturbaciones de mercado -tras el veto ruso que Moscú decretaba en 2014-, como la retirada de frutas a través de las OPHFs o de forma individual -y su posterior distribución gratuita con fines humanitarios- o «cosecha en verde».
Cruz ha reconocido la diligencia del Ministerio a la hora de autorizar la retirada de otras 500 toneladas para la ciruela, aunque UPA reclamaba que la medida se ampliara hasta las 1.000, dado que se está en el punto álgido de la campaña y las condiciones no acompañan: solapamiento de producciones y caída de la exportación a países que antes demandaban mucho a España, como Argelia.
Ha puntualizado que el reglamento establece 34 céntimos de euro de compensaciones por retirada si se destina la fruta a fines humanitarios y de 20,40 euros/100 kg si son otros los fines.
El responsable de frutas y hortalizas de la Federación de Cooperativas Agrarias de Cataluña (FCAC), Albert Capdevilla, cree positiva la retirada adoptada por el Magrama de acuerdo con la normativa, que prevé recurrir al cupo complementario de 3.000 toneladas -para todas las categorías- en casos excepcionales en los que ya se haya agotado el contingente ordinario por el veto ruso.
«Apoyamos al Ministerio» en esta decisión de retirar ahora otras 500 toneladas para la ciruela, aunque recuerda que este sector no es tan relevante en Cataluña como en Extremadura o Levante.
«El mercado de la ciruela está un poco saturado y se han solapado un par de variedades y hay distorsiones», añade Capdevilla, quien confía en que la medida contribuirá a que se recupere mayor fluidez, al tiempo que no cree que de momento sea necesario decretar nuevas retiradas extraordinarias para otras frutas de temporada porque las ventas se desarrollan «bien» y no hay exceso de producción.
El presidente de COAG-Extremadura, Juan Moreno, agrega que desde su organización también habían demandado el Ministerio que se autorizara una retirada de 1.000 toneladas, aunque valoran la ágil respuesta del Departamento en autorizar al menos esas 500 t.
Moreno destaca que el Magrama dispone de 3.000 toneladas adicionales -el cupo ordinario se había agotado ya- para aplicar a los diferentes sectores en caso de perturbaciones de mercado y especifica que, si continúan los problemas, COAG pedirá que se apruebe una nueva retirada para esta fruta de hueso.
Entre los problemas de este año, el presidente indica que la cosecha ha venido con 15 ó 20 días de retraso, lo que ha provocado que se solape la producción de diferentes variedades en un corto intervalo de tiempo, a lo que se suma el cierre del mercado ruso.
El presidente de APAG Extremadura ASAJA, Juan Metidieri, también ha valorado la medida aunque matiza que «si será o no suficiente, lo irá diciendo el tiempo, según vaya avanzando la campaña».
Metidieri ha afirmado que la iniciativa es clave para una comunidad como Extremadura, que concentra el 80 % de la cosecha nacional de ciruelas.
En su opinión, en esta Comunidad no hay exceso de producción pero los precios no acompañan, por lo que confía en que la retirada ayude a conseguir la «firmeza» de las cotizaciones de esta fruta.
La Unión Europea publicó en junio un reglamento que incluye un nuevo paquete de medidas para la retirada de determinadas frutas y hortalizas afectadas por el cierre de este mercado a las importaciones de la UE, entre los meses de agosto de 2016 y junio de 2017, ambos inclusive, recordó hoy el Magrama en un comunicado.
Entre los productos afectados se encuentra la ciruela -incluido en uno de los cupos que aglutina la uva de mesa y el kiwi-, para el que el reglamento comunitario establece una cantidad máxima «a retirar» de 1.500 toneladas para España en el periodo mencionado.
Una vez que dicho cupo ya se ha consumido, el Magrama matiza que se han registrado solicitudes de retiradas adicionales.
La reglamentación permite ampliar el cupo de retiradas por productos en 3.000 toneladas más, facultando a los Estados a decidir a qué productos se asigna y España ha adoptado las citadas 500 t.
Los últimos datos de exportaciones de fruta que aporta el Departamento de aduanas, analizadas por la patronal Fepex, no son positivos para las frutas de hueso, con destacados retrocesos.
Cae la exportación de ciruelas durante el primer semestre, con 14.260 toneladas (-32,24 %) y 19 millones de euros (-24 %), aunque también lo hacen la nectarina -se enviaron al exterior 118.000 toneladas (-27 %) y 163 millones de euros (-21 %)- albaricoque -52.545 toneladas (-7 %) y 77 millones de euros (-8 %)-, melocotón, con 122.000 t (-1,7 %) y 151 millones de euros (-0,9 %)-