El nuevo Plan Estratégico de la PAC, una oportunidad para el desarrollo sostenible. NOVAMONT

La Unión Europea regula los diferentes planes estratégicos en el marco de la Política Agrícola Común (PAC) que cada Estado miembro debe implementar en su territorio, incluyendo las ayudas en el sector de las frutas y hortalizas.

En España, las frutas y hortalizas son el sector agrario con mayor valor de la producción en términos de Producción de la Rama Agraria, con más de 15.000 millones de euros anuales, que representan el 49% de la Producción Vegetal y el 29% de la producción total de la Rama Agraria. Más del 50% de la producción total (28 millones de toneladas/año) tiene como destino la exportación, esto supone que más del 30% del conjunto de las exportaciones agroalimentarias son de frutas y hortalizas.

La mayor parte de los agricultores están agrupados en Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFHs), que son los beneficiarios de las ayudas que regula el nuevo Real Decreto, para financiar las iniciativas que se recogen en sus programas operativos.

El nuevo Plan Estratégico Nacional de la PAC (PEPAC) para el periodo 2023-2027 tiene como objetivo el desarrollo sostenible de la agricultura, la alimentación y las zonas rurales para garantizar la seguridad alimentaria a través de un sector competitivo y un medio rural vivo. Estos cambios se han materializado en el Real Decreto 857/2022, del 11 de octubre, por el que se regulan los fondos y programas operativos de las OPFHs y de sus asociaciones en el marco de la intervención sectorial de la PEPAC.

Entre mucha normativa asociada, se han establecido cambios importantes que facilitan a las OPFH el uso de materiales biodegradables y compostables para algunas aplicaciones concretas en las que el uso del plástico convencional comporta una gestión compleja al final de su vida útil, además de costosa, a la vez que suponen una amenaza para la salud y el estado de conservación de los suelos agrícolas.

Las novedades de la norma suponen una apuesta en España por los bioplásticos biodegradables y compostables

Por primera vez se incorpora como requisito para acceder a las ayudas la obligación de que los acolchados biodegradables en el suelo estén certificados según el estándar UNE-EN 17033, como los que están fabricados en Mater-Bi®, así como que los sistemas de soporte (hilos y clips) estén certificados por el estándar UNE-EN 13432 de 2002, como garantía para certificar que estos materiales subvencionados sean realmente elementos que aporten una solución al final de su vida: biodegradable en suelo o compostable junto con los restos del cultivo. Además, por primera vez se han incluido de forma específica en el texto normativo los clips compostables como material subvencionable, para complementar la solución de los hilos y rafia compostables para entutorar los cultivos en invernadero, sin generar residuos con restos de plástico difíciles de gestionar.

La nueva normativa entró en funcionamiento al día siguiente de su publicación, por lo que ya es de obligado cumplimiento en todo el Estado. Las Comunidades Autónomas son las administraciones sobre las que recae la competencia de tramitar las ayudas y hacer que los fondos lleguen a las OPFHs de cada territorio.

Con la publicación de este Real Decreto se ayuda a los agricultores y a las Comunidades Autónomas a ser más sostenibles y a optar a más ayudas de la PAC, porque supone una oportunidad para incluir en sus Programas de Desarrollo Rural las ayudas que permiten adquirir estos materiales más sostenibles.

De este modo, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación se sitúa a la cabeza a favor de un modelo de economía circular real que puede servir de precedente para otros sectores. España se posiciona como un país que apuesta por la calidad de sus productos y por la sostenibilidad sin afectar a la producción, alineándose con la estrategia ‘Farm to Fork’ de la Comisión Europea.