Campaña
La persistencia de las lluvias durante el mes de marzo ha afectado de forma significativa al inicio de la campaña de zanahoria en el sur de España. Según Manuel Romero, responsable comercial de la zona Sur de Bejo Zaden Ibérica, ya se registran pérdidas de hectáreas anegadas, aunque será necesario esperar a la recolección para comprobar el verdadero impacto en la raíz.
A este escenario se suma un riesgo creciente de enfermedades como alternaria, oídio o esclerotinia, derivado de la combinación de humedad y futuras subidas de temperatura.
La campaña anterior, sin embargo, dejó un buen sabor de boca. Aunque los precios no alcanzaron los niveles del año anterior, la exportación funcionó bien y la productividad fue notable, lo que permitió que los productores cerraran la temporada con satisfacción.
Innovación
Bejo se ha volcado en el desarrollo de variedades con resistencias a enfermedades, una apuesta que ya es realidad en materiales como Berlin, Nazareth, Narita y Nagoya. Esta última, presentada recientemente, ha tenido una excelente acogida entre los agricultores por su baja incidencia de jopo, una planta parásita que causa estragos en ciertas zonas. Por su parte, Narita destaca por su resistencia foliar y elevada productividad.
Romero subraya también el cambio de tendencia en el mercado: la falta de mano de obra está impulsando la preferencia por la zanahoria de lavado frente a la tradicional de manojo. “La de pelado es más mecanizada y requiere menos personal”, apunta, una ventaja clave en el contexto actual.
En este sentido, Bejo trabaja en el desarrollo de una germinación óptima con el Bmox y en obtener variedades con hojas fuertes que facilitan la recolección mecanizada, como es el caso de Berlin, Nazareth y Narita, altamente valoradas por su buen comportamiento en campo, “es muy importante porque las cosechadoras las recogen con mucha facilidad y no necesitan llevar personal detrás”, concluye.